El jardinero Daniel González declaró hoy durante varias horas ante la Justicia al declarar por el crimen de Roxana Galliano, ocurrido hace 12 días en el barrio parque "El Remanso" de Exaltación de la Cruz, mientras la familia de la víctima anunció que presentará pruebas para involucrar al viudo en el homicidio e incluso analizaría pedir su detención.
González compareció más de cuatro horas ante el fiscal de Zárate-Campana Marcelo Pernici, tras ser convocado para corroborar cuál era la relación que mantenía con la víctima. En su primera declaración, el hombre que vive a cinco cuadras de la casa del crimen dijo que no tenía relación sentimental con la mujer, luego de que el ex esposo de la víctima, José Arce, lo señalara como uno de los tantos amantes que esta tenía.
El propio abogado del viudo, Ramiro Rúa, dio hoy detalles del trámite cumplido por González, quien, dijo, "contestó preguntas de la Fiscalía y de los abogados" sobre cuestiones como "las amistados de Rosana y otros temas fundamentales". "Aportó muchos elementos para la causa, dio precisiones sobre mi cliente, el tema de violencia, pero todo por dichos de Rosana", aclaró Rúa, quien dijo que dio "explicaciones creíbles, por ejemplo en la relación que tenían entre ambas familias".
También, dijo el letrado de Arce, se refirió a otros puntos, como la gran cantidad de llamadas que hubo con la víctima. Según trascendió, serían 932 las comunicaciones registradas entre el celular de Rosana y el del jardinero.
González "no se contradijo", admitió, y "agregó datos sobre la relación entre José y Rosana", pero por "lo que le comentaba Rosana". El abogado de Arce reconoció ante la prensa que el jardinero "dijo que Rosana se sentía atemorizada". En ese marco, el letrado, como en ocasiones anteriores, volvió a apuntar al entorno familiar de la víctima.
El fiscal rehusó referirse al contenido de la declaración del testigo, que duró más de cuatro horas, y dijo que la resolución del caso demandará "largo tiempo, no es para unos días".
Poco después del crimen, la Policía allanó la vivienda del jardinero González y secuestró su teléfono celular. Casi al mismo tiempo, el abogado de Arce informaba de la enorme cantidad de llamadas entre González y Galliano, en un intento por demostrar que entre ellos había una relación amorosa.
Galliano (29) fue asesinada de cuatro disparos por la espalda en la noche del 16 de enero último cuando cenaba en la casa que ocupaba en "El Remanso", propiedad de Arce (59), de quien estaba separada luego de haberlo denunciado por maltrato y golpes. La mujer cenaba con su hermana Mónica cuando recibió un llamado a su celular y salió al jardín a atender, oportunidad en la que fue asesinada con una pistola calibre 11.25.
Los investigadores enviaron analizaron el teléfono de la víctima porque sospechan que el asesino conocía que dentro de la casa no había señal y entonces debía salir. La familia de Galliano -que será representada por el abogado Víctor Stinfale- insiste en acusar a Arce y, según fuentes del caso, trataría de comprobar un episodio que estima clave y hasta "podría pedir su detención como posible instigador" del crimen.
El hecho en el que los Galliano harían eje sería un episodio que vivió la mujer en octubre pasado, cuando el ex esposo la llamó para que vaya a su casa de la localidad de Villa Astolfi a buscar a los dos hijos de la pareja, de 3 y 5 años. En esa ocasión, la mujer fue en un Fiat Palio y cuando estaba llegando al lugar -en una zona descampada- habrían aparecido dos encapuchados armados en un auto y se le fueron encima.
La joven comenzó a correr y saltó el portón de la casa donde estaba Arce. Cuando ella quiso hacer la denuncia, su ex esposo habría minimizado el episodio, según dijeron fuentes del caso. Los sujetos se quedaron esperando cerca de 10 minutos y se fueron en el Palio porque se les trabó la marcha del auto en el que iban ellos y "lo prendieron fuego", señalaron los voceros.
"¿Por qué iban a incendiar el auto si iban sólo a robarle? Eso se hace en casos cuando alguien tiene la intención de secuestrar o asesinar", dijeron las fuentes, quienes no dudaron en asegurar que el crimen fue cometido por un sicario instigado presuntamente por alguien del círculo íntimo de la víctima. Como para la familia de la víctima la clave estaría en ese hecho, pedirán a la Justicia los llamados del teléfono de Arce de entre 30 y 40 días anteriores y posteriores a ese episodio.
Según las fuentes, dos meses después del hecho el Palio habría aparecido en una comisaría de la zona con la patente cambiada y habría sido usado por un policía. Luego el vehículo desapareció. Para la familia habría un cúmulo de hechos para apuntar a Arce: las acusaciones de infidelidad, el tema económico y la denuncia por maltrato, por el cual la Justicia le impedía acercarse a menos de 300 metros de la mujer.
Fuente: DYN