POLICIA
QUIÉNES SON LOS CRIMINALES MÁS ODIADOS

Los presos eternos: llevan más de 25 años encerrados con pocas chances de salir

Carlos Eduardo Robledo Puch es el detenido con más años: está encerrado desde febrero de 1972. Un femicida de 75 lo sigue con 38 años en prisión.

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“el angel de la muerte”. 1972 Tigre. Tenía 20 años cuando fue detenido por matar a su cómplice. / 2020 Sierra chica. Duerme solo en una celda y casi no sale al patio. / “el carnicero de san andres de giles”1995 Luis Iribarren. Entró a prisión con 30 años. Hoy tiene 54. / 2020 Gorina. Su último destino. Allí estudia derecho y lo visita su nueva pareja. | cedoc

Carlos Eduardo Robledo Puch (68) perdió la libertad el 3 de febrero de 1972. Había asesinado a once personas en su pico de impunidad. Ni en sus peores sueños imaginó que a partir de ese día todas las mañanas serían iguales.

“El Angel de la Muerte” fue arrestado en “blanco y negro”. En aquella época no había diarios ni televisión a color. La novela Rolando Rivas taxista era un éxito absoluto y en los cines anunciaban el estreno de una película que prometía convertirse en suceso. Se llamaba El Padrino.

Para Robledo Puch el tiempo se detuvo en el mismo instante en que ingresó a la celda por primera vez en la vida. Dicen que cuando una persona ingresa a una prisión el reloj gira más lento y las noches son mucho más largas.

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El asesino múltiple que aterró al país lleva más 17.550 días en la cárcel. En febrero cumplió 48 años encerrado de manera casi ininterrumpida. Entró con 20 años y hoy tiene 68. En todo este tiempo apenas sintió la brisa de la libertad cuando se fugó de la Unidad Penitenciaria N° 9 de La Plata, aunque esa sensación solo le duró 68 horas.

Robledo Puch es consciente de que nadie se animará a liberarlo y de que solo le queda esperar que un día lo visite la muerte en la solitaria celda que ocupa en el penal de Sierra Chica. “Como me siguen negando la libertad, por qué no me cambian la pena por una inyección letal”, desafió hace un par de años Robledo Puch, en una desesperada búsqueda de obtener un beneficio que hasta el momento no recibió.  

Su prontuario horroriza: diez homicidios calificados, un homicidio simple, una tentativa de homicidio, 17 robos, una violación, una tentativa de violación, un abuso deshonesto, dos hurtos y dos secuestros.  

Los informes del preso más peligroso del país nunca fueron buenos. “Nula capacitación educacional con incidencia en el plano laboral. Marcado desinterés por acceder a la actividad escolar o educativa”, detalló uno de los dictámenes elevados por el Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB).

En todos estos años, Robledo Puch nunca logró reinventarse: no adquirió ningún oficio ni consiguió vincularse con el mundo exterior. Sus padres, Víctor Robledo Puch y Josefa Aída Habendak, están muertos. Hace años que el asesino múltiple no recibe visitas.  

En Sierra Chica es el preso más famoso, aunque prácticamente no tiene amigos. De hecho, rara vez sale al patio.  

Los otros. “El Angel de la Muerte” es el preso más antiguo de la provincia de Buenos Aires, aunque hay otros detenidos que llevan más de treinta años encerrados y tampoco tienen chances de salir.

En el ranking de presos más antiguos del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), Osvaldo Longobuco Calidoni  (75) ocupa el segundo lugar, con 38 años de encierro: está preso desde octubre de 1981.

Este hombre asesinó a su mujer cuando tenía 37 años. Hoy tiene 75. Recibió la misma condena que Robledo Puch: “reclusión perpetua más accesoria por tiempo indeterminado”, una norma que le permite a la Justicia prolongar el encierro de una persona sin límite de tiempo.    

En la tercera posición aparece  Víctor Luis Reinaga (55), un criminal despiadado que fue detenido en noviembre de 1988 (acumula 31 años) por abusar de una nena de 12, un doble secuestro y dos homicidios calificados.

El cuarto es Jorge Mendoza Marino, que suma 27 años encerrado por violación, rapto y tentativa de robo, entre otros delitos.

Roberto Ramos Martínez figura quinto con 26 años de encierro. Entró con 19 años por homicidio calificado y hoy tiene 45. Recién después aparece otro asesino múltiple: Luis Fernando Iribarren, con 24 años de cárcel ininterrumpidos.

A diferencia de los criminales anteriores, “el carnicero de San Andrés de Giles” tiene chances de recuperar su libertad en agosto próximo, cuando cumpla 25 de prisión y agote la condena por haber asesinado a sus padres, sus hermanos y su tía entre los años 1986 y 1995.

Iribarren tiene 54 años. Fue juzgado en agosto de 2002. Dos psiquiatras dijeron que sufría un trastorno de la personalidad con reacciones psicóticas. Lo definieron como “esquizoparanoide” y señalaron que cuando cometió los asesinatos no estaba en condiciones de comprender sus actos.

“Tenía una vivencia paranoidea con la familia (pensaba que la familia lo perseguía) y un equilibrio psíquico precario además de sentimientos ambivalentes y frialdad afectiva”, explicó uno de los especialistas. Sin embargo, otros ocho profesionales (entre psiquiatras y psicólogas) entendieron que el acusado era “imputable” y que “siempre supo lo que estaba haciendo”. Por eso, consideraron que era imputable.

Si bien la condena a perpetua que recibió tiene la “accesoria por tiempo indeterminado”, lo que lo diferencia con el resto de los presos que superan los treinta años de cárcel es que logró formar pareja y tiene alguien que salga como garante de su libertad.

Según fuentes penitenciarias, el carnicero de Giles estudia la carrera de Derecho en la Universidad de La Plata y está pronto a recibirse, un punto a favor pensando en su reinserción social después de 24 años ininterrumpidos en la cárcel. Otra señal que anticipa su posible salida es que el juzgado lo habilitó para que pudiera salir a cursar sus estudios, aunque bajo el sistema de monitoreo.

Fabián Tablado, el asesino de las 113 puñaladas que se salvó de una condena a perpetua

La salida de Fabián Tablado despertó una enorme polémica que todavía no cesa. El asesino de las 113 puñaladas dejó la cárcel hace una semana, después de pasar 23 años casi ininterrumpidos en prisión. ¿Por qué este criminal logró salir y los otros no? En principio, porque recibió una condena más baja.

Por el asesinato de Carolina Aló, ocurrido el 27 de mayo de 1996, Tablado fue condenado a 24 años de cárcel, una pena que se alargó dos años y medio más porque en el año 2011 amenazó a su ex mujer y madre de sus hijas.  

Cuando fue juzgado por el asesinato de su novia no existía la figura de femicidio, pero lo insólito es que la Justicia entendió que cometió un “homicidio simple”, pese a que el fiscal de juicio había pedido que se lo condene por “homicidio agravado por alevosía”, que prevé una pena de prisión perpetua.  

En total, Tablado pasó 23 años, nueve meses y un día encarcelado. Como hizo “cursos de formación profesional” logró achicar seis meses más su estadía en la cárcel por el beneficio de “estímulo educativo”.

Cuando fue detenido tenía 21 años. Hoy tiene 44 (este viernes festejó su cumpleaños en libertad). En la cárcel estudió la carrera de Derecho (aunque abandonó), se hizo evangelista y hasta se casó. Al dejar la cárcel de Campana, el asesino de las 113 mostró arrepentimiento.

“No hay un día en que no piense, que no sienta remordimiento y culpa por lo que hice. Es muy difícil. Yo sé que quizás no me crean pero es como me siento”, dijo sobre el crimen que cometió  en su casa de Tigre, la misma donde hoy vive junto a sus padres.

Tablado reconoció ser “muy consciente” de lo que hizo, pese a que en más de una oportunidad manifestó que no recordaba lo que había sucedido. Cuando le preguntaron si había “pagado”, respondió: “Nunca voy a haber pagado en mi interior, en mi conciencia”.

Los mas antiguos

  • C. Robledo Puch: En febrero cumplió 48 años encerrado. Está preso en la cárcel de Sierra Chica. Desde 1972 a 2020 solo salió 68 horas: fue cuando se escapó de la Unidad Penitenciaria Nº 9 de La Plata.
  • O. Longobuco: Es un femicida que está preso desde octubre de 1981 por asesinar a su mujer en Morón. Cuando lo arrestaron tenía 37 años. Hoy tiene 75. Al igual que Robledo Puch está detenido en el penal de Sierra Chica.
  • Victor Reinaga: Fue detenido en noviembre de 1988 por abusar de una nena de 12, un doble secuestro y dos homicidios calificados. Está en la Unidad 12 de Gorina. Lleva 31 años en prisión.
  • Jorge Mendoza: Está alojado en la Unidad Nº 12 de Gorina por abuso, rapto y tentativa de robo, entre otros delitos. Hace 27 años que no sale.
  • Roberto Ramos: Entró con 19 años por homicidio calificado y hoy tiene 45. Acumula 26 años en prisión y también pasa sus días en el penal de Gorina.