Un hombre de 77 años fue asesinado por asaltantes que le habían robado su automóvil y lo atropellaron tres veces con el vehículo en la ciudad bonaerense de San Fernando. Los hijos quisieron realizar la denuncia en la dependencia policial, pero estaba cerrada con llave.
Según familiares de la víctima, el homicidio ocurrió cuando el hombre fue despojado de su vehículo, un Renault 9, por dos hombres que simularon un control policial disfrazados de agentes de la fuerza de seguridad municipal.
Incluso, señalaron que los asaltantes le habrían pasado "tres veces" por encima con el automóvil robado. Cuando los hijos buscaron presentar la denuncia, se encontraron con un hecho insólito: la comisaría estaba cerrada. Damián, hijo de la víctima, declaró a TN que el policía le contó: “La cerramos por la inseguridad”.
Sin embargo, el jefe de la departamental de zona Norte, Claudio Blanco, se hizo presente en la cuadra de la víctima y aclaró “que estaba cerrada una puerta lateral” que da a la zona de calabozos. “La puerta principal de la comisaría estaba abierta”, aseguró el titular de la zona a la señal de noticias.
Ante ésta situación, Damián encaró al policía y ratificó sus dichos: “Era la puerta de afuera y la tuve que patear”, señaló.
El ataque fue perpetrado en la calle Carlos Casares al 3200, donde los asaltantes disfrazados de policías pergeñaron el ardid para engañar el hombre, que se habría puesto detrás del vehículo para impedir la huída.
“Jorge era un hombre temperamental, pero muy buen vecino”, aseguró un vecino de la víctima.