POLITICA
DE MILAGRO SALA A GERARDO MORALES

La expresión de un Estado ausente y de una provincia atravesada por la pobreza

La jefa de la Tupac Amaru llegó a prisión luego de dos décadas de vínculos con el poder político. Su crecimiento bajo el kirchnerismo. El presente de obras y denuncias.

Pasado y presente. Morales y Sala en una vieja fiesta del día del niño organizada para la Tupac.
| Cedoc

Enviado especial a Jujuy

La historia de Milagro Sala es la historia de la Jujuy contemporánea, donde se cruzan el poder político, con protagonistas que se repiten, y dirigentes de organizaciones sociales. “Milagro es una emergente de la ausencia del Estado”, la definió una cooperativista en diálogo con PERFIL. Hija de un sistema que durante más de una década vio crecer su poder, lo alimentó y se aprovechó de él o en el menor de los casos lo toleró sin chistar. Hoy, con el cambio de signo político en la Gobernación y en la Casa Rosada, donde estaban sus padrinos políticos, cayó en desgracia. ¿Es Milagro Sala una corrupta y violenta? ¿Por qué durante 12 años la Justicia no hizo nada? ¿Fue la ayuda a los pobres una excusa para enriquecerse? ¿Por qué buena parte de la sociedad la condena?

Entre 1993 y 1998 hubo cinco gobernadores en Jujuy. La crisis social se los llevó puestos. Hasta que asumió Eduardo Fellner. La década del 90 pegó fuerte en la provincia. La desocupación iba en aumento y la pobreza también. Los piquetes en las rutas eran frecuentes. Los que lideraban la resistencia eran Carlos “el Perro” Santillán y Milagro Sala, entre otros. Hoy, están enfrentados.

En la política, los apellidos Fellner y Morales eran destacados. “Teníamos buena relación”, recuerda Morales. La conoce desde los ‘90, cuando el Frente Gremial era una de las organizaciones que encabezaba la resistencia social y él era diputado provincial. Y dice que la relación se quebró cuando empezó a denunciar el desmanejo de fondos. Habían compartido actos juntos.

La llegada de Néstor Kirchner al poder fue el puntapié para la construcción de un imperio que reinó durante más de una década.

Recibía varios millones al mes provenientes de fondos nacionales, sin ningún tipo de control. Hoy, la Tupac Amaru tiene más de 4 mil trabajadores dedicados a la construcción de viviendas. Son 300 las cooperativas que integran la Red de Organizaciones Sociales que comanda la Tupac, algunas de ellas ya se están yendo.
En poco más de diez años, la Tupac Amaru hizo alrededor de 8 mil viviendas, construyó una escuela primaria y secundaria, un terciario, centros de salud y fábricas propias de materiales de construcción y textil. El barrio más grande es El Cantri, que está en las afueras de San Salvador.

Los más humildes juran que nunca hubo tanto beneficios para ellos, pero hasta sus compañeros de cooperativas condenan los métodos violentos y el manejo discrecional del dinero que tuvo Sala. Se movía con patotas, reinaban los aprietes, y los cortes de ruta eran casi constantes. La Justicia nunca había llegado a meterla presa. El flamante gobernador, Morales, amplió en 24 horas la conformación del Superior Tribunal de Justicia y puso a hombres afines a él en las cuatro vacantes. Esos nuevos miembros fueron los que designaron a los jueces de feria que la metieron presa. Morales dice que él denunció a los jueces que fueron cómplices de los manejos de Sala y que le archivaron causas. Pero jura que no está presa por una cuestión política.  Para quienes la acompañan, Morales quiere capitalizar la fractura de la Tupac. Para Morales, Sala se convirtió en la jefa de una organización delictiva. Nadie tiene una versión imparcial en Jujuy. Lo cierto es que, con la salida de los Kirchner del poder, los tiempos buenos se terminaron para Sala.

El martes el juez debe definir si queda presa

El juez Gastón Mercau, que tiene a su cargo la causa de Milagro Sala, tiene hasta el martes para resolver si la libera o la deja detenida, según dijeron a PERFIL fuentes de la defensa. Esto, previa opinión de la fiscal, Liliana Fernández. Milagro Sala está en el penal de mujeres de Alto Comedero, en San Salvador. El juez dispuso su traslado allí, en teoría, para mejorar sus condiciones de detención. El viernes, la defensa de Sala presentó además dos denuncias. Una fue por la decisión de la Legislatura de suspender la personería jurídica de la organización barrial. Y la otra, porque el día que la arrestaron, la policía quiso allanar la sede de la asociación sin orden judicial.

Críticas del “Perro”

El dirigente jujeño Carlos “Perro” Santillán criticó fuertemente a Milagro Sala. La acusó de haber “reprimido la protesta social” con “patotas”, de haber recibido “muchísima plata, millones” y dijo que “todo el mundo veía salir a los punteros de ella con las bolsas o mochilas llenas de plata del Banco Nación o Banco Macro”. Además, citó una investigación de Laurra Etcharren para sostener que “introdujo la narcopolítica”. Pero la especialista dijo que Santillán confundió los términos de su trabajo.