POLITICA

Acusado por lavado, manda mensajes de amor por Facebook

No hay pistas del paradero del exalcalde de Cancún investigado en Argentina.

Anticipo. La semana pasada PERFIL contó la historia del político mexicano, ex alcalde de Cancún, que compró un campo de US$ 2 millones en Entre Ríos para su hijo de tres años.
| Cedoc

Mientras la Justicia argentina lo investiga por supuesto lavado de dinero y operaciones sospechosas, todavía no existen pistas concretas sobre el paradero del mexicano Gregorio Sánchez Martínez, ex alcalde de Cancún y sospechado de tener vínculos con el narcotráfico. Pero mantiene activa su cuenta de Facebook, en la que publica todos los días mensajes de amor, bendiciones y lecciones morales.

“En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, y renovaos en el espíritu de vuestra mente, y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad”, cita de la Biblia en su cuenta de la red social.

Gregorio Sánchez, conocido como “Greg”, es un político y ex cantante religioso de 51 años, con una gran fortuna de cuyo origen poco se conoce, incluso en México, donde llegó a estar preso por delitos de corrupción.

Tal como adelantó PERFIL en su edición del sábado pasado, la AFIP radicó el 13 de mayo una denuncia en el Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional de Posadas por operaciones sospechosas en la compra de un campo de 930 hectáreas en localidad de La paz, Entre Ríos. La operación se realizó mediante la donación de 2 millones de dólares de Greg a uno de sus hijos, de apenas tres años de edad, que tuvo con Niurka Sáliva Benítez, una médica cubana hija de un oficial de Inteligencia del castrismo, acusada de traficar personas desde la isla. La propiedad quedó a nombre del niño.

Como Sánchez informó domicilio en la provincia de Misiones, aunque estaría deshabitado desde hace meses, quien actúa en la causa es la jueza federal de Posadas, Verónica Sakanata, con autorización del juez federal de Paraná, Leandro Ríos.

Luego de la denuncia de la AFIP, la Justicia de Posadas y Gendarmería allanaron el domicilio de Greg en Posadas y fue pedida su detención. Aunque no hay registros en Migraciones de que haya dejado el país, como se sospecha, aún no se logró dar con él. El último registro en Migraciones es el de su ingreso al país el 27 de enero de este año, por Encarnación, Paraguay. También fue rápidamente allanada la estancia en Entre Ríos, La Silvestre, que cuenta con una mansión de lujo, parques, canchas de polo y una pista de aterrizaje, que también generó algunas sospechas.

En un comunicado y en diálogo con la prensa de México apenas conocida la denuncia, Greg salió a defenderse y acusó a la AFIP de a haber actuado de manera negligente y sin pruebas. Además, aunque aceptó tener negocios en algunos países de Sudamérica, justificó que el terreno en Argentina había sido comprado por su familia (la operación fue realizada por su esposa), y no por él. Aceptó estar fuera de México, pero reservó su paradero por “seguridad propia y de mi familia”. Mientras tanto, la investigación sigue adelante.