Martes 13 de enero. Punta del Este. El croata cuidó cada detalle y le pidió a sus empleados que prepararan la mesa de siempre. El acontecimiento era especial: brindar por su cumpleaños número 67, mirando el paisaje único que le brindan los ventanales de su hotel. Intentó escaparle a los supersticiosos malos augurios que pronosticaban un día diferente, y festejó como todos los años, incluso sabiendo que del otro lado del Río de La Plata, por esas horas, todos los medios ya hablaban de él.
Se trata de Iván Holjevac, el misterioso empresario que, según la Fiscalía de Investigaciones Administrativas cobró, a través de un pool empresario, $ 54 millones del Estado nacional en concepto de una aparente deuda no reconocida por la Justicia. Ahora, pasa sus días en Uruguay, mientras medita sobre su futuro judicial.
El jueves el ministro de Economía, Carlos Fernández, suspendió provisoriamente a Cayetano Intelisano, subsecretario de Administración y Normalización Patrimonial del Palacio de Hacienda. El funcionario fue el principal eslabón de la cadena que autorizó el pago de la supuesta deuda.
Cumbre. Según la investigación de Garrido, Holjevac era el controlador de Accolade, un pool empresario que reclamó ante el Ministerio de Economía una deuda de $ 54 millones de la vieja Caja Nacional de Ahorro y Seguros por contratos con reaseguradoras extranjeras entre 1977 y 1982. Luego de idas, venidas y algunas negociaciones, que incluyeron un pedido de los empresarios de arreglar sólo por $ 11 millones, el acuerdo llegó en octubre de 2007. Economía autorizó el pago y los millones se repartieron. Ahora, con la sospecha de manejos irregulares y corrupción, todos miran al empresario que se benefició. Pero, ¿quién es Iván Holjevac?
Muchos hablan de él como un bohemio, incluso a sus obras se encargó de marcarles el sello de su nostalgia. En 1993 inauguró su sueño personal: el Hotel-Art Las Cumbres. Una compleja edificación en la cima del cerro Pelado, sobre la bahía de Punta Ballena, en la entrada de Punta del Este.