Carlos Beraldi, abogado de Cristina Kirchner, confirmó que apelará el procesamiento de la expresidenta en la causa por presuntas coimas en obras públicas. Advirtió además que el juez federal Claudio Bonadio basó su acusación en "declaraciones de personas" que dicen cosas "que otras personas" les dijeron.
Además, el abogado destacó que en el expediente el financista Ernesto Clarens negó vínculos con la senadora.
"En el caso específico de Cristina Kirchner son apenas unas pocas carillas, unas diez carillas, donde vuelven a transcribir todo de nuevo y donde las supuestas que se citan son declaraciones de personas que dicen (lo) que otras personas les dijeron o (lo) que otros les contaron pero no hay ninguna referencia concreta de que la doctora Kirchner recibió algún tipo de soborno o coima", afirmó Beraldi.
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El letrado señaló además que en la resolución de Bonadio en la causa por presuntas coimas en obras públicas se indicó que el financista Ernesto Clarens declaró: "Resulta una hipótesis falaz que se me atribuya haber intervenido en el manejo de fondos de terceros involucrados en los hechos, en particular Néstor Kirchner, Cristina Kirchner y/o Daniel Muñoz".
En declaraciones al canal C5N, el abogado volvió a criticar con dureza al juez federal Bonadio, a quien acusó de no cumplir "con ninguna norma procesal". "Estos no son arrepentidos, son ventrílocuos", señaló Beraldi, quien indicó que "se les presenta la opción de quedar preso o irse a la casa" y subrayó que son "declaraciones que no tiene ningún valor".
Incluso, el abogado advirtió que a "todas aquellas personas que son responsables de esta investigación" podrían caberle "penas de 8 a 25 años". Es que Beraldi indicó que así lo indica la "ley 23.097" que dispone "penas correspondientes al homicidio" para quien obtenga declaraciones policiales o judiciales "mediante torturas".
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El letrado se quejó de que la expresidenta está procesada por "cuatro asociaciones ilícitas", lo que consideró como "un disparate jurídico". Además, cuestionó que Bonadio dictara la prisión preventiva de Cristina Kirchner argumentando su posible influencia en "medios" de comunicación "afines".
En forma paralela, afirmó que "si una persona primero dice una cosa, después otra y después otra no puedo darle ningún valor", al apuntar contra declaraciones del exfuncionario José López.