Las declaraciones de ayer de Álvaro Zicarelli abrieron una nueva grieta del caso Maldonado. El analista y ex empleado de Gabriela Michetti dijo que los hermanos de Santiago aprovecharon políticamente la muerte del joven artesano, y los comparó con Pablo Ferreyra, hermano de Mariano, joven de 23 años asesinado en una movilización.
"El caso es parecido al de Pablo Ferreyra, hoy legislador del FpV", dijo a Perfil Zicarelli. En las redes sociales generó una ola de críticas y una ola de reivindicaciones de tales afirmaciones. Y en su derecho a réplica, Ferreyra salió a contestarle.
Para el hermano de Mariano, "nadie está dispuesto a pagar con la muerte de un familiar o ser querido para tener una representación política". "Solo alguien con pensamientos perversos y cargados de odio puede decir eso", disparó.
"En primer lugar, hace una comparación de las tragedias personales que vivimos Sergio Maldonado y yo y dice que tuvieron una función de catapultarse a una representación política, viéndolo como una prenda, como una acción mercenaria de hacer política para conseguir tal cosa", consideró el legislador.
Y explicó que "la respuesta ahí es que siempre en todos los casos donde está implicada la violencia institucional la voz de los familiares ha sido fundamental para darle a un muerto un discurso y un contenido político, para garantizar que la impunidad no termine de instalarse en una causa. Es muy importante, contrariamente a lo que dice".
Para ejemplificar, dijo que en el caso Maldonado, "Sergio fue más que importante porque fue quien denunció desde el primer momento a la Gendarmería, fue quien contó cómo se quedó ocho horas junto a su hermano por no confiar en ninguna institución y fue quien logró unir a todas las organizaciones de Derechos Humanos para marchar cuando él quiso a Plaza de Mayo. Se transformó en la voz de la verdad".
En cuanto a su rol como legislador, Ferreyra argumentó: "La sociedad es así, politiza para acabar con las muertes, para acabar con la impunidad que hay como en este caso, donde hay un encubrimiento, una tergiversación. El lugar que tengo yo en la legislatura es producto de esos años en los que uno se revaloriza en esa clave consiguiendo tener una representación política producto de lo que hizo".
Mariano Ferreyra fue un militante del Partido Obrero asesinado en 2010 de un balazo en el pecho por empleados de la Unión Ferroviaria, con la complicidad de la Policía Federal que dejó que se enfrentaran en medio de una movilización que reclamaba la efectivización de algunos empleados tercerizados en la Línea Roca.