Ariel Lijo, juez federal, se declaró incompetente para tomar la causa que involucra al desplazado titular de la Aduana, Juan José Gómez Centurión. Derivó el caso al fuero en lo Penal Económico.
Para justificar su decisión, Lijo argumentó que "del análisis de los hechos denunciados y la prueba colectada se puede establecer que las maniobras, por sus características y habitualidad, serían las propias de una organización dedicada al contrabando de mercaderías”.
En estos casos la “competencia corresponde al Fuero Penal Económico de esta ciudad", sentenció el magistrado.
A pesar de que no tomó la causa, el fallo de Lijo benefició a Gómez Centurión, ya que en él se sostiene que "el resultado de las medidas dispuestas no han permitido un avance sobre su eventual responsabilidad en las maniobras denunciadas".
"Las medidas probatorias dispuestas no han logrado vincular" al desplazado titular de la Aduana "a algún hecho delictivo de competencia federal", agrega.
La denuncia contra Gómez Centurión fue promovida desde el Ministerio de Seguridad, a cargo de Patricia Bullrich. La base fueron escuchas del entonces titular de la Aduana que lo involucraría en maniobras ilegales.
En ellas se lo escuchaba hablando con el empresario Carlos Oldemar Barreiro Laborda, alias "Cuqui", ex dueño de la compañía de alarmas y recuperadora de autos robados Lo Jack.