Nadie podría afirmar que no está desempeñando sus funciones, sin embargo vale destacar que la presidenta Cristina Fernández hace casi dos semanas que no visita la Casa de Gobierno. Su viaje a Chile por la conmemoración de los 30 años de la mediación papal por el conflicto en el Canal de Beagle o su gira comercial por Rusia justifican su ausencia de Balcarce 50, pero en sus regresos al país, más allá de protagonizar anuncios desde Olivos, no pasó siquiera un instante por su despacho.
Su gira fuera de la Casa Rosada comenzó el jueves 4 de dicembre cuando Cristina viajó a Chile. Primero visitó Punta Arenas (3.000 kilómetros al sur de Santiago), donde anunció junto a Michelle Bachelet acuerdos de integración.
Al día siguiente ambas mandatarias participaron de una misa presidida por el cardenal Odilo Pedro Sherer (representante del Papa Benedicto XVI), en conmemoración a Juan Pablo II, por entonces Pontífice, quien medió en el conflicto que ambos países mantenían por el Beagle.
Pasado el fin de semana, Cristina Fernández viajó a Rusia el 8 de diciembre (día de la Virgen), donde realizó una gira de dos días. Allí se reunió con su par ruso, Dimitry Medvedev (firmó acuerdos energéticos y de comercio) y con el primer ministro, Vladimir Putin, quien, aseguran, es el dueño del poder político de Moscú.
En su regreso de Europa oriental, la Presidenta anunció desde Olivos, sin pasar por la Casa Rosada, un nuevo paquete de medidas económicas.
El jueves 11, recién llegada de su gira por Rusia (acortada 24 horas por el fallecimiento del patriarca de la iglesia ortodoxa rusa, Alexis II) Cristina anunció en la residencia de Olivos las nuevas líneas de crédito para incentivar el consumo y el lanzamiento de canastas navideñas a precios accesibles.
Al otro día, siempre en la Quinta de avenida Maipú, la Presidenta lanzó el programa para renovar el parque automotor de taxis.
Más tarde, el mismo 12 de dicembre, fiel a su costumbre la Presidenta se retiró el fin de semana a descansar a su casa de El Calafate, en Santa Cruz (superó la semana sin poner un pie en su despacho de Casa de Gobierno).
Ya tenía agendada otra gira: Costa de Sauipe. Cristina pasaría los días 16 y 17 en el estado de Bahía, Brasil, con motivo de la XXXVI Cumbre del Mercosur y la Cumbre de América Latina y el Caribe sobre Integración y Desarrollo.
Antes de ello, el lunes 15, también desde Olivos, la jefa del Estado anunció el Plan Argentino de Obras Públicas por un valor de $111.000 millones. Luego inauguró obras en una automotriz del barrio porteño de Mataderos, mientras que más tarde compartío con el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, la reinaguración del Rosedal en Palermo. Finalmente, sin pasar un instante por Balcarce 50, partió hacia Brasil.
La última vez que Cristina Fernández de Kirchner estuvo en la Rosada fue el pasado jueves 4 de diciembre, cuando dejó inaugurada una muestra artística por los 25 años de la democracia en la planta baja del edificio.
Desde entonces, las giras internacionales sumado a su decisión de trabajar desde la residencia de Olivos generaron un número llamativo: hace 13 días que la Presidenta no pasa por su despacho frente a la Plaza de Mayo.
