El pasado 22 de diciembre la sociedad Hotesur, dueña del hotel Alto Calafate, cambió su cúpula directiva y según informó el Boletín Oficial pasó a estar integrada por los hijos y otros familiares de la presidenta Critisina Fernández de Kirchner. Sin embargo, la empresa que está en la mira judicial no deja de plantear dudas acerca de su funcionamiento.
Según el texto publicado en el BO, el directorio anterior determinó la sede social de la firma en la avenida Leandro N. Alem al 530 piso 3 de Buenos Aires, mientras que las nuevas autoridades lo hicieron en Alem 1080 piso 3. No se informó dónde se llevó a cabo la Asamblea, tal y como establecen las normas, y en la misma deberían que haber esta presentes los accionistas de la empresa, entre ellos, la propia Presidenta.
Según informó el diario Clarín, en la Inspección General de Justicia (IGJ) sólo figuraba como única sede de Hotesur una dirección que no funcionaba, ubicada en la calle Lavalle 975 piso 4 de Capital Federal.
Cuando el juez federal Claudio Bonadio ordenó el allanamiento de Hotesur, la empresa informó en un comunicado que en marzo de 2010 su “domicilio legal” se había trasladado a Santa Cruz, pero en 2012 la sociedad declaró ante la IGJ que su sede se ubicaba en las oficinas “fantasma” de la calle Lavalle.
Esta misma situación volvió a darse ahora, cuando la empresa K afirmó que se había trasladado a Santa Cruz, mientras que según el Boletín Oficial en marzo de este año la sede se situaba en Alem al 530.
El hotel Alto Calafate fue administrado hasta finales del año 2013 por el empresario kirchnerista Lázaro Báez. Un día después que Hotesur modificara su cúpula directiva, el fiscal federal Guillermo Marijuan pidió al juez federal Sebastián Casanello que llamara a declaración indagatoria al empresario por lavado de dinero.