“Estaba ahí porque Diana era su madre”, gritó indignada María Isabel “Chicha” Chorobik de Mariani, fundadora de Abuelas de Plaza de Mayo, e interrumpió en el juicio al abogado defensor del represor MIguel Etchecolatz.
La interrupción de "Chicha" Mariani se produjo cuando el abogado se preguntó “qué hacía una menor en ese cuartel”, en referencia a la imprenta que funcionaba en el domicilio en el que fueron asesinados cuatro personas, una de las cuales era Diana Terrugi, que estaba con su hija desde entonces desaparecida.
“Chicha” Mariani, quien desde hace 30 años busca a su nieta, Clara Anahí, reaccionó por primera vez en tres meses que llevan las audiencias.
Mariani, que no pudo contenerse ante las declaraciones del letrado Luis Bofia Carri Pérez, no logró escuchar que el magistrado también había agregado con respecto a su nieta que “así como murió esa nena, murieron otros”.
Luego de la crisis emocional de la Abuela, el Tribunal interrumpió el alegato de la defensa de Etchecolatz para que la mujer sea atendida por el cuerpo médico.
En el cuarto intermedio del juicio, la fundadora de Abuelas de Plaza de Mayo, comentó que “es una ofensa tan grande lo que dijo de mi nietita que no pude menos que levantar la voz, algo que no suelo hacer”.
Por su parte, Alejo Ramos Padilla, abogado de Mariani, le advirtió a la defensa del represor: “No vamos a permitir que diga que Clara Anahí murió”.
La bebé de tres meses fue secuestrada durante un operativo de un grupo de fuerza conjuntas, el 24 de noviembre de 1976, en la casa ubicada en la calle 30, entre 55 y 56, de la ciudad de La Plata, donde murieron Diana Teruggi y otro tres militantes.