POLITICA
lolo regueiro, la víctima fatal de una represión salvaje

“Jamás pensé pasar por esta locura”: el desgarrador relato de los hijos del hincha de Gimnasia muerto

César Gustavo Regueiro tenía 56 años y trabajaba en la Municipalidad de La Plata. Fue con sus hijos y sus nietos a la cancha, y sufrió una descompensación cuando intentaba escapar de los gases lacrimógenos y los balazos de goma. Juliana, su hija, fue una de las primeras personas en dar a conocer la triste noticia: “Vinimos a alentar al Lobo y se me fue el Gordo”, reveló. Sergio, el hijo, aseguró: “Él quería salir por los nenes que estaban con él y no podían respirar”.

 20221008_lolo_reguiero_gimnasia_cedoc_g
Dolor. Lolo era un exjugador de la Liga Amateur Platense. Siempre que podía iba a la cancha a ver a su querido Gimnasia con sus hijos y sus nietos. | cedoc

Familiero, amigo de sus amigos, pero por sobre todo hincha de Gimnasia y Esgrima La Plata. El Lobo era el mundo en el que se movía César Gustavo “Lolo” Regueiro (56) a diario. Sus debilidades eran sus hijos y fundamentalmente sus nietos, con quienes habitualmente iba a la cancha cuando su equipo jugaba de local. El jueves 6 de octubre pasado no fue la excepción. Fue al estadio Juan Carmelo Zerillo acompañado de su hija Juliana; su hijo, Sergio, y sus nietos de 5 y 6 años. Se ubicaron como siempre en la popular local, como a ellos le gustaba, para alentar a su querido Lobo, más aún teniendo en cuenta que su equipo estaba peleando el campeonato y esa noche podía descontarle puntos a Boca.

Lo que nunca imaginaron fue que a los pocos minutos de iniciado el partido, los incidentes ocurridos afuera del estadio obligaron a los

Regueiro a abandonar la cancha, protegiendo, sobre todo, a los más chicos. Entre llantos, gritos, apretujones, corridas y gases lacrimógeneos alcanzaron a salir del estadio. Pero Lolo se desvaneció apenas había dado unos pocos pasos fuera de la cancha del Bosque. Si bien sus hijos y médicos alcanzaron a subirlo a una ambulancia, nada pudo revertir la situación. Lolo había había muerto. El frio parte médico aseguraba que se trató de un paro cardiorespiratorio. Pero para la familia y sus seres queridos la culpa de su absurda muerte fue la brutal represión de la policía de Buenos Aires sobre los asistentes al partido de futbol.

Esto no le gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

Juliana, su hija, fue una de las primeras personas en dar a conocer la triste noticia. Desde sus redes sociales contó que había ido a “alentar al Lobo” en el partido con Boca.

“Vinimos a alentar al ‘Lobo’ y se me fue el ‘Gordo’... Quiero avisar que acaba de fallecer mi papá, César Gustavo ‘Lolo’ Regueiro”, escribió en su cuenta de Facebook horas después de la tragedia.

Juliana y su padre se encontraban en la tribuna local del estadio del Bosque al momento de comenzar los incidentes entre la policía bonaerense e hinchas que se encontraban afuera con la intención de ingresar, presuntamente sin entradas.

César Regueiro, empleado municipal, de 57 años, sufrió una descompensación producto de la atsmósfera irrespirable por los gases lacrimógenos, fue atendido en el lugar y trasladado en ambulancia privada al hospital San Martín, donde llegó sin vida, según el parte del Ministerio de Salud de la provincia.

“Jamás pensé pasar por esta locura, esta desgracia de perder a mi viejo yendo a ver una vez más a nuestro querido ‘Lobo’. Tantos tablones compartidos de local, de visitante, y jamás pensé que por una maldita represión policial te me ibas a ir”, lamentó.

“Te Amo Gordo y que se haga justicia de allá arriba”, reclamó sobre la muerte de su papá.

Sergio, en tanto, contó que adentro de la cancha “no se podía respirar”. “Él quería salir por los nenes que estaban con él y no podían respirar, pero estaba todo cerrado”, indicó. “Apenas sale del estadio cae descompuesto. Mi hermana me dijo que lo dejaron tirado, que no lo quisieron subir a la ambulancia, la misma gente le hizo RCP”, remarcó.

“Decían que mi papá estaba muerto, pero estaba consciente, recibe un nuevo ataque de gas pimienta y se vuelve a descomponer. Lo dejaron tirado”, agregó Sergio. “Mi papá era un hombre sano, estaba un poco excedido de peso, pero nunca fumó, no tomó, era sano” remarcó. A su vez, señaló que en el hospital notaron que ‘Lolo’ “tenía la cabeza lastimada, no sabemos si es por un piedrazo o el golpe cuando se cayó”.

Anoche, decenas de simpatizantes de Gimnasia se concentraron frente al estadio reclamando justicia por la muerte de “Lolo”.

 

Uno de los heridos continúa internado

Un simpatizante de Gimnasia permanecía anoche internado como consecuencia de los gravísimos incidentes registrados dentro y fuera del estadio Juan Carmelo Zerrillo.

De acuerdo a los voceros, se encuentra en observación por un piedrazo que recibió en la cara y le provocó una lesión máxilo facial.

Según el documento, por esa lesión, al cierre de esta edición, se encontraba a la espera de una atención específica.

Además se informó que el sistema de salud público no registró el ingreso de personas con lesiones oftalmológicas graves y desmintió la versión difundida por algunos medios de comunicación y redes sociales “sobre un el supuesto caso de un niño/a menor de edad afectado/a en uno de sus ojos”.

Por los incidentes, falleció César Gustavo “Lolo” Regueiro, hincha del Lobo de 57 años, que “murióproducto de una muerte súbita y paro cardiorrespiratorio no traumático.

Según el informe, a Regueiro “se le  realizó RCP en el lugar sin éxito. Se lo trasladó en ambulancia de servicio privado e ingresa al hospital San Martin sin vida”.

De acuerdo con el parte del Ministerio de Salud de laProvincia de Buenos Aires, después de los incidentes ocurridos en inmediaciones del estadio Juan Carmelo Zerillo, ocho simpatizantes del Lobo resultaron con heridas de balas de goma, que debieron ser atendidos en dos hospitales de La Plata.