La abuela de Lorena Martins se mete en el escándalo por trata de personas

La olla que destapó Lorena Martins en torno a su padre Raúl y una supuesta red de trata de personas hizo que la familia se cruzara en declaraciones muy fuertes. Ahora su abuela Cledi Presilla Coggiola, madre de Raúl, habló ante el diario Quequi, de México y la acusó de apropiarse de un inmueble que su familia tenía en Argentina. Pero Lorena negó todo y tildó al medio de cómplice.

Según la señora, su nieta la visitó el pasado 28 de octubre en una casa que la familia posee en Buenos Aires junto a su pareja y ex letrado de Raúl Martins, Claudio Adrián Lifschitz. Una mujer y dos personas más armadas entraron para echarla de la vivienda. Siempre según su versión, comenzaron a insultarse y todo terminó a los golpes y con la irrupción de la policía.

“Vi más gente armada y pensé lo peor. Salí corriendo a esconderme en un cuarto, hablando por teléfono, gritando, pidiendo ayuda. Después me encerraron en una habitación y cambiaron las chapas, prácticamente estaba secuestrada”, dijo Presilla Coggiola al diario mexicano.

Perfil.com se contactó con Lorena, quien negó todo rotundamente: “Entiendo que mi abuela defienda a su único hijo, pero nada de eso pasó. Es otro apriete más de ellos. La denuncia además la hace en un medio en el cual el dueño es uno que recibe prostitutas de Martins".

Perfil.com: - ¿Qué relación dice usted que hay entre el medio que publica esto y Martins?

- Ellos son amigo de mi padre. Son íntimos. Están en las agendas de él y les manda minas para enfiestarse.

-¿Qué repercusión tuvo todo esto en su familia en España?

- Mis hermanos recibieron llamados de amenazas de que si yo no me callaba iban a cobrar.

(*) de la redacción de Perfil.com.