La fiscal paraguaya Sandra Quiñónez, quien indagó a Ibar Pérez Corradi por la falsificación de documentos en ese país, anunció que hoy se celebrará la audiencia de extradición del detenido a nuestro país.
Quiñónez estimó además que es probable que el detenido "se allane a ser extraditado" a la Argentina y que, por ende, ese proceso "sea mucho más corto que los 45 días" que usualmente lleva.
En la misma línea, Carlos Broitman, uno de los abogados del acusado, dijo en Asunción que el plazo para la extradición no depende de su defensa. "Si fuera por nosotros, ya estaría en Buenos Aires", sostuvo.
Quiñónez contó que el presunto autor intelectual del Triple Crimen de General Rodríguez usaba "cuatro identidades". Y detalló que usaba tres identidades argentinas y una paraguaya, pero que "la que más utilizaba era la de José Luis Fernández".
Además, la representante del Ministerio Público del vecino país afirmó que el prófugo le exhibió sus manos y le confirmó que se hizo una cirugía hace cuatro meses para borrarse las huellas digitales.
La fiscal país consideró que el empresario "no se entregó", y que el operativo de captura fue un trabajo de inteligencia encabezado por el mismo comandante de la Policía de Paraguay, Críspulo Sotelo, coordinado con la fuerza de seguridad de Brasil.
Para Quiñónez el acusado por el triple crimen de General Rodríguez "no se iba a entregar" porque se hizo "desaparecer sus huellas dactilares". "Si su intención era entregarse a la Justicia no iba a someterse a la cirugía que se sometió", opinó. Según las autoridades argentinas, el prófugo pagó 50.000 dólares por esa operación.
Ibar Pérez Corradi fue capturado este domingo en la ciudad brasileña de Foz de Iguazú, cerca de la triple frontera con Paraguay y Argentina. Llevaba 49 meses prófugo de la justicia argentina y había formado una familia con la paraguaya María Gladys Delgado Britez, de 23 años.