Los planes sociales tomaron la agenda esta semana: primero, con la declaración del ministro de Desarrollo Social, Juan Zabaleta, quien dijo que no se van a producir más altas de beneficiarios. Luego, con el anuncio por parte de la Casa Rosada de incorporar, y de manera progresiva, a 4 mil destinatarios de programas al trabajo formal.
La decisión de Zabaleta promete mayor tensión con aquellos movimientos sociales más combativos, como los que forman parte de Unidad Piquetera, que durante los últimos meses anunciaron movilizaciones y cuestionaron la demora de entrega de alimentos.
Desde el entorno del ministro son conscientes de la situación pero, ante PERFIL, dejan en claro que están focalizados “en la generación de empleo genuino” y en fortalecer la financiación de cooperativas a través de distintos planes. En este contexto, mencionan que grupos como el Polo Obrero Tendencia y otros movimientos sociales ven con buenos ojos estas acciones de la cartera.
Con respecto al anuncio del Gobierno de este viernes, participaron en la sede de Desarrollo Social el funcionario anfitrión junto a sus pares Claudio Moroni (Trabajo), Eduardo “Wado” de Pedro (Interior), Matías Lammens (Turismo) y Elizabeth Gómez Alcorta (Mujer y Diversidad); además de empresarios, se dio cita el secretario general del gremio de los gastronómicos (Uthgra), Luis Barrionuevo.
“De acá en adelante van a estar viendo que todas las semanas vamos a estar articulando con distintos sectores de Argentina para potenciar el trabajo”, ya que “el Ministerio de Desarrollo Social ha ido generando mesas de acuerdos con distintos sectores”, destacó Zabaleta al momento de tomar la palabra.
Asimismo, agradeció a las organizaciones sociales “que muchas veces llegan antes que el Estado a resolver los problemas que hay desde el punto de vista social”, y consideró que “son parte fundamental de la Argentina por el trabajo que vienen haciendo, sobre todo en el sector de la economía popular”.
Y resaltó que el evento fue “una muestra de la mesa de reconstrucción de Argentina, el Estado nacional, los empresarios, los representantes de los trabajadores, las organizaciones sociales que tienen un rol trascendental”. Luego, aseguró que “el futuro es con trabajo” y este es “el ordenador social y el objetivo que tenemos este año”.
Incluso, el ministerio precisa que desde 2021 se han generado mesas de trabajo con distintos sectores, y diálogo productivo para recorrer el camino que terminó en el anuncio. Y citan lo sucedido el pasado 15 de octubre, día en el que Alberto Fernández encabezó la firma del convenio para, justamente, convertir planes sociales en empleo genuino en los sectores gastronómico y turístico.
En aquella oportunidad, el jefe de Estado apuntó que “estamos empeñados en recuperar la producción, que empecemos tan rápido como podamos a lograr que los que tienen un plan tengan un empleo, y formalizar a la Argentina”. Después firmó el decreto 711/2021 para darle el marco legal necesario para que Desarrollo y Trabajo efectúen las modificaciones “necesarias en sus programas de formación, empleo e intermediación laboral, con el objetivo de convertir las diferentes prestaciones de asistencia a personas desempleadas o con trabajos precarizados en incentivos para la contratación de sus beneficiarios y beneficiarias bajo la forma de empleo asalariado registrado en el sector privado”.
