La defensa de Christian Von Wernich, el primer sacerdote condenado a reclusión perpetua en Argentina por delitos de lesa humanidad, consideró hoy que las imputaciones contra su cliente "no quedaron acabadamente demostradas” y que el fallo que lo condenó a reclusión perpetua "no se ajusta a derecho".
Según el abogado Juan Martín Cerolini, en el juicio al ex capellán policial "no han sido demostradas, con la claridad y la certeza que se necesita para una condena de este tamaño, todas las imputaciones que se le han hecho".
"Si hay una condena que la sociedad considera justa, considero que la condena no ha sido ajustada a derecho", aseveró Cerolini en declaraciones a Radio Uno.
De esta manera se refirió a la reclusión perpetua dictaminada ayer por el Tribunal Oral Federal 1 de La Plata, a cargo de Carlos Rozanski, contra el cura de 68 años acusado de colaborar con la última dictadura militar.
Cerolini concedió que su defendido "quizá sí (tiene) una responsabilidad: el hecho de haber estado ahí y no haber dicho nada, que tampoco lo sabemos, porque no ha sido materia de juicio el hecho de decir o no".
El abogado se refirió a las visitas de Von Wernich a centros clandestinos de detención que, a su entender, realizó "en calidad de capellán policial, una de sus funciones".
"Desde la defensa no somos necios en reconocer la existencia de desaparecidos, de torturados, de vejados y de muertes, eso está absolutamente comprobado en la causa de los militares", pero "no está comprobada la participación" de Von Wernich en estos hechos, insistió el letrado.
En esta línea, Cerolini explicó que pidió la absolución del cura en el homicidio del denominado "Grupo de los siete", porque "el único testigo que hay para acreditar o desechar" la participación del cura en ese hecho "está muerto".
Fuente: Télam