La decisión del presidente Alberto Fernández de flexibilizar ciertas restricciones destinadas a controlar el avance del coronavirus generó ayer la reacción opositora, que le pidió que deje de “improvisar” y que avance con medidas destinadas a lograr la recuperación de la economía, estancada desde hace ya un año y medio.
“Hoy vence la disposición del Gobierno que restringe el ingreso de varados en el exterior. Dejen de improvisar. Hay que controlar los ingresos y aislar a los viajeros, no impedirles regresar a su país. Tras más de un año de pandemia, no pueden seguir cometiendo los mismos errores”, sostuvo el ex ministro de Salud y precandidato a diputado por Adelante Ciudad, Adolfo Rubinstein.
En rigor, el Gobierno dispuso un nuevo cupo de 1.700 ingresos por día al país, superior a los 600 viajeros que se habían habilitado hasta el momento, pero Rubinstein puso el foco en la necesidad de controles rigurosos más que de la prohibición de entrar al país.
En ese sentido, el titular de la UCR nacional y precandidato a senador por Mendoza, Alfredo Cornejo, recordó que hace seis meses propuso el regreso de extranjeros vacunados contra el covid, como parte de su trabajo al frente de la Comisión de Turismo de la Cámara baja. “Florencia Carignano lo anuncia como novedad. Estaría genial que aprendan a escucharnos y no tardaran en implementar medidas que ayudaran al país”, señaló el ex gobernador en torno a la propuesta para permitir el ingreso de viajeros que dejen divisas en el país.
“Ya es hora de tomar medidas que tiendan a la recuperación del sector turístico. Habilitar el ingreso de extranjeros con el esquema de vacunación completo es una buena opción. El Gobierno debe entender que miles de familias vieron su economía destruida por el cierre de fronteras”, insistió.
Desde la Coalición Cívica también hubo réplicas, enfocadas en la actitud del Presidente en la pospandemia. “Un año y medio después de haber incrementado la pobreza y el desempleo, y de haber cerrado las escuelas, el Presidente sigue viviendo en su realidad alternativa, donde hay vacunas y festejos para pocos”, cuestionó el diputado nacional Maximiliano Ferraro. En la misma línea, el legislador porteño Hernán Reyes rechazó la exhibición de “un Presidente eufórico ante un país que sufre y que ve aumentar la pobreza desde su llegada. Construyó su propia normalidad llena de privilegios, no entiende ni atiende los problemas urgentes de los argentinos”, dijo en redes sociales.
En su mensaje, el Presidente destacó que “estamos entre los veinte países que más vacunaron. Y la vacuna es la puerta de salida de la pandemia. Cada mes falta menos para que todos y todas la crucemos. Vamos a volver a vivir responsablemente la vida que queremos”. Con tono de optimismo, el mandatario mostró su confianza en la recuperación con el aumento de la cobertura con vacunas para una porción más importante de la población.
Sin embargo, el diputado radical Luis Petri hizo otra lectura sobre las cifras del coronavirus en Argentina y citó que “Argentina es el quinto país en el mundo con más casos por cada 100 mil habitantes, con bajísimos niveles de testeos. Superamos los 5 millones de contagios. Solo el 17% está vacunado. 107 mil muertos. El peor gobierno que manejó la pandemia según el Índice de Resiliencia de Bloomberg”.
