Las semanas próximas se presentan como una densa temporada de reclamos, paros y protestas gremiales. El caso más cercano es el del transporte. El vocero de la Unión Tranviarios Automotor, Mario Caligari, ratificó hoy la intención de cumplir un paro "por tiempo indeterminado" desde la cero hora del jueves, en reclamo de mejoras salariales para choferes de larga distancia. "Hay tiempo para negociar, si es que hay voluntad de los empresarios", dijo el sindicalista.
En declaraciones a radio La Red, Caligari dijo esta mañana que "el sueldo inicial, de bolsillo, es de unos nueve mil pesos", y el reclamo salarial es del orden del "28 por ciento y adicionales", como consiguieron los choferes de corta y media distancia. Ayer, el jefe de la UTA, Roberto Fernández, anunció la medida, ante el "fracaso" en las negaciones salariales en el marco de las paritarias. Ante este escenario, el jefe de Gabinete Jorge Capitanich aseguró que el acuerdo está dado, pero falta que los "suscriban los empresarios".
Por su parte, y en este marco de reclamos, la cúpula de la CGT oficialista que encabeza el metalúrgico Antonio Caló se reunirá este miércoles para definir su accionar ante la falta de respuestas del Gobierno nacional a sus reclamos por la actualización del mínimo no imponible y por la baja del nivel de empleo.
A la par, el sindicalismo opositor encabezado por Hugo Moyano (CGT Azopardo) y Luis Barrionuevo (CGT Azul y Blanca) se reunirán en el transcurso de esta semana para definir la fecha de un paro nacional para reclamar por "ganancias, universalización del salario familiar, y el 82 por ciento móvil para jubilados y pensionados", según informó a DyN un dirigente del sector.
Alineado con este reclamo, y nuevamente cercano a Moyano se mostró Pablo Micheli de la CTA opositora. Micheli confirmó la realización de un paro general de actividades para la segunda quincena del mes de agosto a realizarse en conjunto con la CGT Azopardo y la CGT Azul y Blanca. "Mañana vamos con una marcha al Congreso pidiendo que se exceptúe al medio aguinaldo del impuesto a las Ganancias", declaró a Radio La Red.
Respecto al gremialismo afín al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, fuentes de esa central obrera informaron a esta agencia que la reunión encabezada por Caló se celebrará mañana desde las 16 en la sede porteña del Sindicato de Peones de Taxis.
En el entorno de Caló manifestaron mucha preocupación por la "no actualización del impuesto a las ganancias, la baja del nivel de empleo y las suspensión" de trabajadores, principalmente en el sector industrial. Asimismo se indicó que los gremialistas pro gobierno analizan "pedir una reunión con legisladores oficialistas para reclamarle un cambio de fondo por el tema de ganancias", que afecta a miles de trabajadores.
El caso de UDOCBA. Los maestros agremiados en la Unión de Docentes Bonaerenses realizan hoy una marcha a la Casa de la Provincia en Capital Federal y preparan un paro para mañana para reclamar la reapertura de las paritarias salariales. El sindicato, afín a la CGT de Hugo Moyano, reclama un salario mínimo de 6.400 pesos por lo que insistirá con las medidas de fuerza para que el gobierno de Daniel Scioli revea su postura de no admitir nuevas discusiones por los sueldos del sector estatal. El jefe de UDOCBA, Miguel Díaz, recordó que plenarios de UDOCBA advirtieron que "el conflicto salarial docente no había terminado" y señalaron que "la nueva escala salarial 'negociada' lejos estaba de cumplir con las expectativas de los trabajadores de la educación".
Bancarios. Por su parte, La Bancaria logró en abril una suba del 29 por ciento en su salario. Como no se realizó una actualización sobre el mínimo no imponible de Ganancias, el gremio ahora salió a pedir a los bancos que le den una compensación económica a los empleados que sufren fuertes descuentos por Ganancias. "Los bancos pueden dar esa compensación. Ganaron un 24% en dólares en los últimos años”, dijo un dirigente de La Bancaria. Y agregó: “Nos reuniremos en los próximos días con la patronal para trasmitir nuestro pedido, pero si lo rechazan no nos quedaremos de brazos cruzados", consignó Clarín.
