El paro de transporte lanzado por el sindicalismo opositor para el 31 de marzo en reclamo por cambios en el Impuesto a las Ganancias va tomando cada vez más fuerza con el correr de las horas. A la CTA de Pablo Micheli, que ya había confirmado su adhesión, se le sumó hora la Asociación Bancaria.
El secretario general de los bancarios, Sergio Palazzo, anunció que los trabajadores de las entidades financieras se plegarán a la medida de fuerza. “En las negociaciones colectivas pedimos que el sector empresario acompañe la pérdida que tiene el trabajador (por Ganancias), implementando algún sistema de devolución”, señaló.
"Hay que ser claro, el único responsable de la pérdida de poder adquisitivo a manos de ese impuesto es el Estado, y el Gobierno es quien administra el Estado nacional", continuó Palazzo, en diálogo con Radio Mitre. El secretario general del gremio bancario indicó que su sector podría ir a un nuevo paro "ante la desidia que tienen en resolver el problema".
Palazzo aseguró que desde el ámbito gubernamental "suponen que porque afecta al 10% de la población trabajadora, quienes reclaman somos poco menos que la burguesa salarial" y recordó que los sueldos de 20 mil pesos tributan "hasta $3.000 en Ganancias".
Finalmente, el gremialista recordó que la Asociación Bancaria tiene "una posición clara respecto a Ganancias, ya que en el 2014, el sindicato realizó diez paros nacionales, de los cuales seis fueron por Ganancias".
El paro fue propuesto la semana pasada por la CGT Azopardo que lidera Hugo Moyano, y recibió rápidamente el visto bueno por parte de la CTA de Pablo Micheli. El líder del gremio de transporte La Fraternidad, Omar Maturano, prometió una huelga "a gran escala". Luis Barrionuevo, de la CGT Azúl y Blanca, postergó su definición hasta los próximos días.
