Cristina Kirchner prepara otro desembarco en Buenos Aires. Su regreso desde El Calafate podría darse este mes. El ex ministro de Educación Alberto Sileoni le organiza un encuentro con docentes y universitarios, según confirmaron a PERFIL fuentes allegadas al ex funcionario. Los preparativos también corren por cuenta del ex jefe de los espías, Oscar Parrilli.
A medida que avanzan a paso rápido las causas judiciales en su contra, la ex presidenta tiene previsto utilizar otra vez su fundación para hacer política. Los docentes y universitarios la escucharán en el auditorio del Instituto Patria. La fecha todavía no fue definida. Pero la dinámica será la misma que la del encuentro con los científicos, que le organizó el mes pasado el ex ministro Daniel Filmus.
Los miembros de su antiguo gabinete son los encargados de armarle la agenda, pero, aclaran, la iniciativa es de ella. Aunque en su entorno aseguran que está tranquila, su abogado, Alberto Beraldi, no descansa. Ahora, CFK sumó la investigación por Los Sauces, a cargo de Claudio Bonadio. El juez ordenó esta semana allanar tres departamentos de la familia por la fuerza. Ella no logró que lo desplacen de la causa dólar futuro ni que lo destituyan a través del Consejo de la Magistratura. En las pesquisas, que tienen diferentes jueces (está la causa Hotesur) está involucrado también su hijo, el diputado nacional Máximo Kirchner. Desde el Sur, Cristina digita la estrategia judicial junto a su abogado. Pidió involucrar a directivos del Banco Central y al vicejefe de Gabinete, Mario Quintana, en la causa dólar futuro. Hasta ahora, CFK se negó a responder las preguntas de Bonadio y sólo presentó un escrito. Considera que lo que hay es una persecución del “partido judicial”. En su entorno sostienen que fue Cambiemos el que digitó la devaluación y que se favoreció con esa maniobra porque varios de sus integrantes habían comprado contratos de dólar futuro. Pidieron, incluso, que dejen de pagarse por el momento. Una catarata de presentaciones judiciales por parte de los diputados del bloque del Frente para la Victoria refuerzan la contraofensiva judicial de la ex presidenta.
Conflictivo. El bastión del kirchnerismo, Santa Cruz, en tanto, vive momentos de tensión. Los estatales tienen previsto hacer varios cortes de ruta en la semana, disconformes con la propuesta salarial de la gobernadora Alicia Kirchner. Hasta ahora, sólo cerró la paritaria un grupo reducido de empleados públicos, pero los docentes, que son mayoría, no lo hicieron. La semana que pasó hicieron varios piquetes. Además, la provincia enfrenta el reclamo de los trabajadores petroleros, pero éstos están dirigidos a las operadoras petroleras y el epicentro del conflicto está en Comodoro Rivadavia.
El aumento de la tarifa de gas pegó de lleno en la provincia. Los Concejos Deliberantes de todos los municipios aprobaron por unanimidad rechazarlo, y mañana irán a la Justicia para frenarlo.
En ese contexto vive hoy Cristina Kirchner en Santa Cruz, mientras su cuñada, Alicia, intenta pilotear los problemas de la administración.