POLITICA

Recrudecen las internas en el gabinete y habría cambios

La licencia de Cristina potenció las pujas de poder entre algunos ministros. Crece la desobediencia al vice Amado Boudou.

Respaldo. Carlos Zannini, Juan Manuel Abal Medina y Oscar Parrilli, los de mayor confianza.
| Cedoc

Con Cristina Fernández fuera del poder, recrudecen las internas dentro del gabinete. Algunos ministros están en estado casi de rebeldía: ninguno acepta órdenes del vicepresidente, hoy a cargo del Poder Ejecutivo, Amado Boudou. Y son pocos los que acatan pedidos del secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini; o del jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, con menos peso aún.

El mayor indicio de la falta de coordinación que reina en el Gobierno hoy fue el testimonio del ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo. Primero dijo que dudaba de que Boudou le pudiera dar una orden y después admitió que estatizó el Ferrocarril Sarmiento sin el consentimiento de nadie. Algunos sostienen, incluso, que el vicepresidente se enteró del anuncio por la televisión.

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Randazzo mantiene una interna feroz con su par de Planificación, Julio De Vido. La guerra comenzó cuando “el Flaco” se quedó con el control del transporte que antes ostentaba De Vido, y cuestionó la ausencia de política ferroviaria de los últimos treinta años. Pero se agudizó por los negocios con China.

El intermediario del titular de Planificación para la compra de trenes chinos era Franco Macri, empresario y padre del jefe de Gobierno porteño. Pero cuando absorbió la cartera de Transporte, Randazzo no aceptó mediadores y negoció directamente con la empresa CSR Qingdao Sifang la compra de 409 vagones para el Sarmiento y el Mitre. En ese momento, Macri padre cuestionó la decisión del ministro del Interior.

Nuevo gabinete.
En el medio de esta tensión, se rumorea que habrá cambios en el Gobierno luego de las elecciones. El primer fusible en saltar podría ser el propio Abal Medina. Para ese cargo se escucha el nombre del gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, hizo trascender en los medios que desembarcaría en el gabinete. “No hace tamaña operación en los medios sin el aval de alguien importante en la Casa Rosada”, descifró un funcionario a este diario. Además, agregó: “No se olviden de que él fue quien acercó a (Miguel) Galuccio a YPF”.

Otro gobernador podría hacer pie en el Poder Ejecutivo. Se trata de Jorge “Coqui” Capitanich, de Chaco. Algunos lo ven como un buen reemplazo para el ministro de Economía, Hernán Lorenzino. De esta manera, el Gobierno buscaría fortalecerse hacia adentro y hacia afuera para evitar la licuación del poder a la que está sometida una Presidenta sin posibilidad de una reelección.  Se generan dos vacantes que requieren cambios: se van el titular de Agricultura, Norberto Yahuar, y el de Salud, Juan Manzur. Para reemplazar al primero suena Juan Oscar Anglesio, segundo del INTA y amigo de Máximo Kirchner. Para el segundo, Juan José Mussi, actual secretario de Medio Ambiente. Aunque este último podría tener otro destino: presidir la Cámara de Diputados bonaerense, hoy en manos de Horacio González, hombre del intendente de Ituzaingó, Alberto Descalzo.

Sin embargo, estos cambios no se harán hasta que Cristina Kirchner se recupere y retome las riendas de la Casa Rosada, cuando los médicos se lo permitan.