El Ministro de Economía suele ser el funcionario nacional más conocido, luego del presidente. Perfil.com realizó una encuesta callejera para saber cuántos transeúntes conocían el nombre y apellido del actual titular de la cartera de Hacienda. Para Martín Lousteau, el resultado del relevamiento implica una noticia mala y otra buena.
El dato negativo para el joven funcionario es que -en plena calle Florida, a unas cuadras de la Casa Rosada- 6 de cada 10 personas no saben su nombre. Y lo positivo, es que generalmente, a lo largo de la turbulenta historia argentina, los titulares de la cartera de Hacienda se hacen conocidos por las crisis y los problemas económicos que aquejan al país. No es el caso de Lousteau.
Los números exactos, que no son cifras del Indec, indican que el 57% no sabe quién es, mientras que el 43% lo conoce.
El actual titular del Palacio de Hacienda, era un perfecto desconocido antes de asumir. Ante la consulta de un periodista de Perfil.com, no muchos pudieron decir su nombre. La mayoría retiene el dato de que es un "muchacho joven". Entre las mujeres, muchas recuerdan sus rulos. Otras, dicen que "es un niño" y muchas aseguran que "es buen mozo".
También hay quienes, irónicamente, afirman que en realidad, el verdadero ministro de Economía es el titular de la Secretaría de Comercio Interior, Guillermo Moreno, o el líder de la CGT, Hugo Moyano. Es que el encargado de apretar a los empresarios para que no aumenten los precios tiene tanto poder que hasta la misma presidenta Cristina Fernández de Kirchner le dijo "ministro" en un furcio memorable. Y el jerarca sindical, para muchos, es el que verdaderamente dispone de las medidas económicas del actual Gobierno.
Algunas personas contestaron que el ministro seguía siendo Domingo Cavallo. Otros, en cambio, yendo más lejos en el tiempo, dijeron que el cargo sigue siendo ocupado por personajes como Álvaro Alsogaray, o José Martínez de Hoz. Y hasta hubo quien recordó a Juan Vital Sourrouile.
A lo largo de los gobiernos, los ministros de Economía tuvieron un perfil alto. Pocas veces amados, usualmente odiados. Pero siempre conocidos. Algunos, dejaron una marca tan fuerte que aun años después -incluso décadas- muchos los siguen recordando, más para mal que para bien. Es que el ciclo eterno de crecimiento, inflación, recesión y desempleo hace que el común de los argentinos sea crítico a las gestiones de los ministros encargados del área.
Habrá que realizar esta misma encuesta cuando Lousteau termine su gestión para verificar si más gente lo conoce o si se sigue manteniendo en un virtual anonimato.