Tensó la relación con el kirchnerismo duro pero evitó romper el bloque y se mostró molesto con los que jugaron por afuera. Mientras su sucesor en la gobernación, Sergio Uñac, se saca fotos con el macrismo, José Luis Gioja se consagra como candidato de la unidad para el PJ, aún con el apoyo del ala cristinista. Y en el peronismo varios dirigentes especulan sobre la jugada del sanjuanino: puso huevos en distintas canastas y todo terminará con su consagración como presidente del partido o lo que pretende es contrarrestar lo que considera un excesivo acercamiento de Juan Manuel Urtubey a Macri.
“Gioja nunca se equivoca”, dice un operador del peronismo que analiza sus pasos y el de su ladero en el Instituto Gestar, Diego Bossio. “Si a Macri le va mal en el corto plazo, la figura que se va a reivindicar es la de Cristina. Si están todos con Urtubey, cerca de Macri, el kirchnerismo tiene el campo libre”, analiza.
Aunque durante los últimos tiempos del mandato de Cristina Kirchner la relación estuvo marcada por la frialdad, y la misma ex presidenta lo vetó cuando fue propuesto por el bloque de los gobernadores como presidente de la bancada en Diputados, Gioja limó las asperezas con el propio Máximo Kirchner durante la extensa reunión que mantuvieron en el Palacio, la noche del martes 2 de febrero, pocas horas antes de que se produjera el quiebre de la bancada que conduce Héctor Recalde.
De ese encuentro, el sanjuanino se llevó el apoyo del camporismo para encabezar una eventual lista de unidad en el partido, que renovará autoridades el próximo 8 de mayo. Antes, había logrado declaraciones de Urtubey en el mismo sentido. Al día siguiente de la reunión con Máximo, planteó las demandas de los gobernadores, que clamaban por mayor apertura y menos sectarismo camporista. Por la noche, criticó a los díscolos que se alejaron de la bancada.
“Es raro que Bossio se haya ido y el Flaco haya decidido quedarse. Son una sociedad”, dijo un histórico del peronismo. El mismo dirigente, que mantiene diálogo con la ex presidenta, también admitió que si bien Gioja entiende las demandas de los gobernadores, no comparte lo que considera un “excesivo” acercamiento de Urtubey a Macri. El camporismo también alberga ciertas desconfianzas. “Se queda para traer de nuevo a los que se fueron, después de ser electo presidente del partido, o para terminar de irse con los que quedan y decir que el peronismo está en otro lado”, especula un operador.
Mientras Uñac teje buenas relaciones con el macrismo, en la Rosada ya anuncian que “en algún momento” Gioja y el bloque de diputados de San Juan también partirán hacia el sector ahora liderado por Bossio y los salteños.
Sin embargo, el ex gobernador se muestra componedor hacia adentro del PJ para tratar de armonizar a todos los sectores y repite en las reuniones que “nadie sobra y todos son necesarios” y un diputado que lo conoce desde hace más de 20 años advierte al macrismo: “Gioja es muy hábil, podrá negociar, pero nunca va a jugar en contra del peronismo”.