Siete años después de comenzada la investigación por el crimen de Paulina Lebbos, la Justicia tucumana se dignó a mostrar hacia donde va la investigación. Y quedaron más dudas que certezas.
El informe lo realizó el fiscal de la causa, Carlos Albaca, luego de que el presidente de la Corte tucumana, Antonio Estofán, se lo exigiera. Allí menciona ocho hipótesis que van desde un femicidio por parte del exnovio de Paulina, Víctor César Soto, hasta una fiesta donde habrían participado "hijos del poder".
Hacia ningún lado. Una vez conocido el informe, Perfil.com recorrió direcciones de testigos que supuestamente tenían datos acerca de la fiesta que se habría producido en la localidad de Raco.
Una de ellas era María Graciela Gómez, quien, según el fiscal, había llamado a la secretaria del legislador Sixto Terán, Marcela Alejandra Juárez, para contarle que su hijo "había participado de una fiesta en Raco, pero que él no la había matado, y que a otras personas se le fue la mano".
Sin embargo, Gómez dijo desconocer absolutamente el tema y negó haber hecho ese llamado: "Me sorprende esto, no tengo nada que ver y meten gente para ensuciar la causa de este pobre hombre (por Lebbos)", dijo a este portal. Por su parte, la secretaria del legislador se negó a hablar del hecho y rápidamente se despidió: "No voy a comentarles nada" afirmó.
"Le cortaron los dedos de la mano para que no haya huellas, es similar al caso de María Soledad, alguien está encubriendo todo", señaló Alberto Lebbos en diálogo con No Somos Nadie, por Radio Metro. "Desde el inicio se cometieron cientos de ilícitos. El informe del fiscal no comenta nada de todas las trampas que se hicieron. Entonces, hay alguien poderoso que protege. ¿Y quién es? el gobernador José Alperovich", comentó.
Para Lebbos, "Alperovich protege y asciende a todos los que cometieron encubrimientos. Hace 7 años dijo a los medios que tenía el nombre del asesino y hasta el día de hoy no lo dice".
Enviado nacional. Cansado de instancias provinciales, Lebbos hizo llegar su caso a la secretaría de Derechos Humanos de la Nación. Desde allí se envió a Bernardo Lobo Bugeau, quien tuvo acceso a la causa, pero no le dejaron tomar copias y faltarían fojas en el expediente. Ahora el padre de Paulina ruega a todo aquel que pueda aportar datos, se acerque a los medios "ya que hay miedo de hablar con la Justicia de la provincia.
(*) De la redacción de Perfil.com. Desde Tucumán.