Al igual que el presidente Mauricio Macri, la gobernadora bonaerense no suele cambiar a sus asesores frecuentemente. Ni como ministra de Desarrollo Social porteña ni como vicejefa de Gobierno tuvo grandes modificaciones en su staff. Sin embargo, María Eugenia Vidal ya prepara, al menos, dos cambios de ministros para fin de año.
El primero: la salida del poderoso ministro de Infraestructura, Edgardo Cenzón, a fin de año. Vidal rezongó cuando éste se lo dijo. Aunque le aseguró que seguirá como “asesor”; para la gobernadora era uno de los blancos de sus llamadas domingueras a la tarde noche cuando recordaba algún tema de gestión. Los ministros la habían apodado “tsunami” cuando aparecía esos días de descanso.
Hombre de diálogo directo con Macri, tiene a su cargo un megaministerio que incluye todas las áreas de obra pública. Cansado, decidió dejar su cargo y le propuso a Vidal dividir en dos su cartera: un área que contendrá las empresas de servicios públicos y transporte, y otra con las obras hidráulicas y de infraestructura.
Para el primero de los ministerios suena Edgardo Volosin, director provincial de Desarrollo de Servicios Públicos. Ex Edenor, y especialista en temas energéticos, se había jubilado y decidió volver al ámbito laboral en la gestión pública. Junto al subsecretario, Pablo Gaytán, fueron quienes enfrentaron la audiencia pública por el aumento de la luz y salvaron a la Gobernación de un entuerto judicial similar al que tuvo que pasar la Nación.
Para el otro futuro ministerio ya se anotó el entusiasta Rodrigo Silvosa, subsecretario de Infraestructura Hidráulica; sin embargo, a Vidal le genera dudas. También al equipo de Cenzón: pocos quieren seguir con él si va de ministro.
El otro cambio, sin una fecha concreta aún, será la salida del secretario de Legal y Técnica, Julio Conte Grand, quien ocupará la silla de la Procuraduría bonaerense cuando la quilmeña María del Carmen Falbo finalmente deje su cargo. ¿Le habrá anticipado la fecha a Malena Massa cuando la visitó hace diez días? Incógnitas vidalistas.
Conte Grand es otro hombre clave. Hoy la gobernadora asegura que firma “sin leer” lo que le entrega su principal asesor jurídico. A tal punto que fue él quien armó el organigrama de funcionarios del área de Justicia y quien aconseja al gabinete en esa materia. Un Zannini sin maoísmo.
Aunque se tomará su tiempo, Vidal también planea proponer al camarista Carlos Mahiques para ocupar un lugar en la Corte Provincial
