Un momento inesperado se vivió durante la visita de Mauricio Macri a Río Ceballos, en Córdoba. Diez minutos antes de reunirse con más de 400 intendentes, el Presidente decidió bajarse del auto que lo transportaba para saludar a un grupo de vecinos que lo esperaban al grito de "Sí, se puede".
Lo que no calculó Macri es que había un grupo de ambientalistas y militantes del Movimiento Socialistas de los Trabajadores (MST) que lo comenzaron a insultar. En medio de la confusión una señora se acercó e intentó pegarle un carterazo que no llegó a destino pero logró un darle un empujón.
Macri no perdió la compostura y se dirigió nuevamente al vehículo custodiado por la guardia de infantería que trataba de contener a los revoltosos para luego concurrir al acto previsto.