Victor Blanco nunca se anduvo con proyectos pequeños. Así como en su momento estuvo a cargo de Cinema y La Madelaine (solo por mencionar dos lugares) el presidente de Racing tiene un nuevo negocio en Puerto Madero: el Hard Rock Café. Dueño del local donde funcionó Bice, uno de los más emblemáticos del polo de restaurantes por excelencia de Buenos Aires, Blanco renovó el espacio para hacer rentable la franquicia con la famosa cadena gastronómica. Ayer, fue la inauguración formal del que es el cuarto establecimiento de la cadena estadounidense en el país, que arribó a la Argentina en 1995.
Como suele ocurrir en todo el mundo, el local no queda inaugurado hasta que se rompe una guitarra en el escenario. Ayer por la noche, le tocó a Blanco ser quien tome el instrumento y lo golpee hasta destruirlo. Divertido y enérgico, le dio varias veces contra unos ladrillos estratégicamente ubicados en el piso, mientras su hija, Barbara, lo filmaba entre risas. La imagen le recordó a algunos las reiteradas veces que Charly García rompió guitarras en sus recitales.
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Blanco es dueño de esta franquicia junto a un grupo de dos socios más. Si bien no es oficial, trascendió que este negocio le costó USD 1 millón. El restaurante, de 450 metros cuadrados, está decorado con memorabilia de músicos locales e internacionales.
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Blanco lleva cinco décadas en el rubro gastronómico. Gestionó lugares que fueron parte de la historia gastronómica de Buenos Aires: El Vesuvio, Petit París, La Banderita, Cinema, La Madelaine, Bice, El Patio Cervecero, Academia Della Pizza y La Esquina Carlos, entre otros.
En 2011, fue electo vicepresidente de Racing y asumió la conducción tras la renuncia de su titular, Roberto Molina, en 2013. Validado por los votos en diciembre de 2014, fue reelecto tres años después, por el 62% de los socios. Tiene mandato hasta fines de 2020. En Racing festejó dos títulos: Apertura 2014 y Superliga 2018/19.
MC
