Una enorme nube de polvo suspendida por el viento y la humedad de las arenas del Sahara ha penetrado en España y los Baleares, tiñendo de un anaranjado intenso los cielos de la costa mediterránea.
Se trata de los vientos de la tormenta Celia que empujan arenas saharianas, lo que hará que llueva barro en varias regiones de España. La densidad de este polvo ha transformado la imagen de lugares como Illas o Cartagena, donde el cielo parecía incendiado. La mancha colorada alcanzará incluso a Galicia y Asturias, tras penetrar con la máxima densidad por la franja costera que va desde Granada a Barcelona, explican desde la Agencia Estatal De Meteorología de España (AEMET).
Una tormenta de arena del Sahara cubrió de polvo naranja a España
Este fenómeno, que podría durar varios días, reduce la visibilidad y empeora la calidad del aire. El paisaje cambiará en cuando las lluvias que trae la tormenta Celia echen al suelo las partículas atrapadas en altura y llueva barro rojo.
Los efectos en la salud y el ambiente
Las partículas afectan el sistema respiratorio y las más pequeñas pueden llegar hasta los pulmones, explican desde la Organización Mundial de la Salud (OMS). Para las personas sanas, las consecuencias no van más allá de efectos irritativos, lagrimeo y tos por una exposición esporádica.
La afección de la salud varía según la concentración de polvo en el aire. La recomendación de la OMS para personas con enfermedades respiratorias como EPOC, asma o alergias es exponerse lo menos posible a estas partículas y sobre todo no realizar ejercicio intenso al aire libre. En caso de tener que salir a la calle, los especialistas recomiendan hacerlo con mascarilla SFP2, ya que las quirúrgicas no son capaces de filtrar partículas tan pequeñas.
El polvo sahariano tiene elementos como el fósforo o el hierro que tienen efectos positivos para la fertilización del suelo y en los mares. Además, estos episodios sirven para que la sociedad en general tome conciencia sobre la importancia de la calidad del aire y del planeta.