El jefe de la Policía Metropolitana, Eugenio Burzaco, admitió hoy que falla el sistema de selección de personal para la fuerza "en algunos casos particulares", tras la detención de un comisionado de la dotación en un operativo contra el narcotráfico en el partido bonaerense de Vicente López. Además, reconoció que "es una falta grave" la que se le imputa al jefe policial y reconoció luego que, por "situaciones penales", al menos diez efectivos tuvieron que ser desafectados de la Metropolitana, desde su creación.
"Evidentemente, en algunos casos particulares, sí", respondió Burzaco consultado por radio Mitre sobre si falla el sistema de selección de personal para la fuerza. Sin embargo, sostuvo que estaba prevista la posibilidad de tener "algunos problemas" de esta característica cuando se constituyó la dotación "tomando gente con experiencia previa". "Las tres cuartas partes (de los efectivos) provienen de la (Policía) Federal", argumentó.
No obstante, aseguró que "el personal que está hoy (en la Metropolitana) es idóneo", aunque resaltó que "nunca se está exento de que haya alguno que tenga algún problema" cuando se trabaja con un grupo numeroso, en alusión a los mil integrantes de la fuerza. Luego, Burzaco admitió que "es una falta grave" la que se le imputa al comisionado Simón Rodrigo, quien fue detenido el viernes en su casa de la localidad de Villa Adelina, en Vicente López, acusado de tenencia ilegal de arma de guerra y explosivos.
Según los efectivos que arrestaron a Rodrigo (57), en medio de una investigación judicial sobre narcotráfico, el comisionado tenía en su domicilio un revólver calibre 38, una pistola con dos cargadores completos, dos cajas de municiones y dos granadas de uso militar, además de una tercera lacrimógena. En la vivienda, además, fue capturado su hijastro, de 24 años, con 227 cápsulas de éxtasis.
Fuente: DYN
