Las obras de renovación y puesta en valor que encaró el gobierno porteño sobre la calle Florida no pudieron amortiguar el golpe que provocaron sobre los locales comerciales la caída del turismo internacional y las medidas económicas adoptadas por el gobierno nacional. Un estudio publicado en agosto por el gobierno de la Ciudad sobre la peatonal más emblemática de la City, por donde circulan a diario miles y miles de personas, reflejaba que en abril pasado Florida tenía 22 locales desocupados. Sin embargo, en una recorrida por la zona, PERFIL confirmó que entre el 1 y el 999 de la calle existen 32 negocios vacíos, lo que muestra un incremento de casi el 50% en seis meses.
"Para nosotros, la situación se fundamenta en dos factores: la falta de turistas extranjeros y la depreciación que sufrió Florida a partir de la venta ilegal”, opina Germán Gómez Picasso, de la consultora Reporte Inmobiliario. “Nadie les asegura a los locatarios que no vuelvan a instalarse los manteros ni que se reactive el turismo internacional”, agrega.
Desde el Ministerio de Turismo porteño, en tanto, explican que la tendencia se da por la caída en el gasto de los visitantes extranjeros. Según informaron desde esa cartera, el consumo se desplomó más del 30%, al tiempo que el aumento de la brecha cambiaria entre el dólar oficial y el dólar blue profundizó el déficit de divisas provenientes de ese sector. Héctor López Moreno, titular de la Asociación Amigos de la Calle Florida, también adjudica el cierre de comercios a la merma del turismo: “Nos transformamos en un país caro para los extranjeros y esto se nota en la calle. El cepo cambiario ahuyentó a los turistas de buen poder adquisitivo”.
Tour. Desde Rivadavia hasta Marcelo T. de Alvear se pueden observar, sobre ambas manos de Florida, locales de diferentes metrajes a la espera de ser alquilados o vendidos. Los más afectados son los negocios chicos, donde se instalaban casas de artículos regionales y marroquinería. La observación realizada por PERFIL incluye, al igual que el informe del GCBA, tanto a los comercios que hay sobre la calle como a aquellos que pertenecen a galerías.
La cuadra que va desde Corrientes hasta Lavalle es la más emblemática de una tendencia negativa. Cinco locales presentan la persiana baja o están disponibles para alquiler o venta, o en reparación. En esos metros se encuentra la mítica confitería Richmond, que cerró sus puertas en agosto de 2011. Para Pablo Manes Marzano, analista inmobiliario de U.S. Equities Realty, la situación tiene otras aristas. “Los dueños de los locales tienen que acomodarse a los tiempos actuales. Piden cifras muy altas por el alquiler porque no quieren perder rentabilidad. Pero, sin ventas, los locatarios no llegan a cubrir los costos”, dice.
A metros del cruce con la avenida Córdoba se encuentra otro edificio emblemático de Florida que también está vacío: la tienda Harrod’s, que tuvo su momento de esplendor entre los años 70 y 80. A la lista se suman otros grandes locales, ubicados en los cruces con Paraguay y con Marcelo T. de Alvear, casi Plaza San Martín. El gobierno porteño lanzó un plan de revitalización de la peatonal que incluyó mejoras en la iluminación, instalación de maceteros, reparación de veredas y remodelación de fachadas históricas. Se invirtieron más de $ 19 millones.
Más peatonales en el Microcentro
La peatonalización del centro porteño es una apuesta del gobierno de la Ciudad que avanza sin pausa. El jueves se anunció que está comenzando la etapa 2 del Plan Microcentro, una idea que apunta a mejorar el espacio público al tiempo que busca sacar los autos de las calles céntricas. Los trabajos incluyen la peatonalización de 43 cuadras de las calles Maipú, Perón, Suipacha, San Martín y Esmeralda, y son coordinados por los ministerios de Desarrollo Urbano y de Ambiente y Espacio Público. Desde estas carteras planean finalizarlos para marzo de 2015. En ese momento, el 70% del Microcentro será prioridad peatón.
Entre las tareas que se realizarán se destacan la nivelación de la acera con la calzada, la colocación de luminarias LED, la instalación de cincuenta contenedores soterrados y la renovación del mobiliario urbano. Además, se revalorizarán 53 cuadras en Lavalle, Córdoba, Corrientes, Alem, Rivadavia y Pellegrini, y se restaurarán las fachadas de 75 edificios de interés patrimonial. El plan demandará una inversión final de alrededor de $ 300 millones.