La búsqueda del submarino ARA San Juan, el navío perdido desde el 15 de noviembre en el Mar Argentino con 44 tripulantes a bordo, pasó de ser un operativo de rescate a uno enfocado solo en la localización del buque. En palabras de Enrique Balbi, vocero de la Armada: “No habrá salvamento de personas”. La trágica noticia de este jueves dio por concluído un megaoperativo de 15 días que incluyó la colaboración de naves de distintos países. Sin embargo, y a pesar de que se manejan diversas hipótesis, aún no se sabe con certezas qué pasó con la nave.
Día por día, la búsqueda del ARA San Juan
El submarino partió el lunes 13 de noviembre desde el puerto de Ushuaia con destino a su base, en la ciudad de Mar del Plata. La Armada aportó información al juzgado federal de Esquel donde detallaban que el último contacto que tuvieron con el Ara San Juan fue el día miércoles 15 de noviembre, a las 7.30 de la mañana.
Jueves 16 de noviembre. Por la noche comienza a conocerse la noticia en los medios acerca de la desaparición del submarino Ara San Juan, con 44 personas a bordo. Ese primer día, se atribuyó la pérdida de contacto con la nave a un posible incendio en el banco de baterías que almacena la energía eléctrica.
Viernes 17 de noviembre. Ese segundo día, la Armada Argentina oficializa la pérdida de contacto con el ARA San Juan y comienza el intento de localización del submarino, con el que no hubo contacto desde el miércoles a la mañana cuando estaba a unos 430 kilómetros de la costa, al sudoeste de la Península de Valdés. Al enterarse de lo acontecido, el ministro de Defensa, Oscar Aguad, quien se encontraba en una visita en Canadá, debió interrumpir el viaje y regresar al país. Familiares y amigos de los tripulantes se hicieron presentes en la Base Naval de Mar del Plata para buscar información.
El presidente Mauricio Macri por su parte, envió durante esa jornada un mensaje a través de su cuenta de la red social Twitter donde aseguró que harían lo necesario para hallar al submarino "lo antes posible". Además, detalló que se encontraba en contacto con los familiares de los tripulantes para "informarlos y apoyarlos".
Sábado 18 de noviembre. En el tercer día de búsqueda el vocero de la Armada Argentina, Enrique Balbi, informó que lo ocurrido con el submarino Ara San Juan "pudo ser un problema de comunicación" o también de "alimentación", aunque no descartó la posibilidad de que haya sufrido un "un black out de baterías" y que pueda estar en la superficie. Ante esto, se declara el "estado de búsqueda y rescate".
El avión P-3 perteneciente al programa IceBridge de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio de los Estados Unidos (NASA) sobrevuela la zona donde buscan al submarino y se suma a la búsqueda.
Durante la misma jornada, el Ministerio de Defensa informó oficialmente que se detectaron ese día 7 llamadas satelitales que se habrían realizado desde el submarino y que no llegaron a enlazar con las bases de la Armada Argentina. Eso indicaría que la tripulación intentó restablecer contacto. Ante esto, se trabajó para determinar su localización precisa.
Apoyo del Papa. Francisco envió su "ferviente oración" por los tripulantes del submarino ARA San Juan, y alentó "los esfuerzos" para "encontrar el navío" en el Atlántico Sur.
Domingo 19 de noviembre. El Conicet envió dos busques escenográficos para la búsqueda: el "ARA Austral" y "ARA Puerto Deseado", que forman parte de la flota científica. Ambos zarparon desde el puerto de Mar del Plata rumbo a la zona de rescate con equipamiento de última tecnología.
La Armada Argentina preparó un minisubmarino, una campana de rescate y un vehículo sumergible de control remoto provisto por Estados Unidos. Desde el organismo advirtieron que no hay "clara evidencia" de que las llamadas satelitales fallidas que se recibieron fueran del submarino.
Lunes 20 de noviembre. El portavoz Enrique Balbi, informó que investigaban una serie de ruidos que se escucharon en el océano a 360 kilómetros de Península Valdés. Asimismo aclaró: "No hay que asociar la avería a la desaparición", en referencia a un desperfecto mecánico que se había conocido en las últimas horas y que no había sido dado a conocer por la Armada. La avería, explican, se había producido días antes de que se perdiera la comunicación.
Aviones de cinco países se suman a las tareas de búsqueda, mientras siete naves parten desde distintos puntos del país hacia la Patagonia para intentar localizar el buque perdido. Sin embargo, las malas condiciones climáticas de ese día dificultaron el operativo.
En un video grabado desde el Destructor ARA "Sarandí", una de las naves que participa de la búsqueda, se pueden observar las grandes olas y fuertes vientos en el área de Búsqueda.
El presidente Mauricio Macri viajó a Mar del Plata para solidarizarse con los familiares de los tripulantes. Allí, fue increpado por una de las presentes, quien le espetó: "¿Por qué en vez de bajar en otras cuestiones no bajan en algo verdaderamente importante que es la vida de todos nuestros familiares reparando un submarino? Es prácticamente un suicidio mandarlos en algo que es viejísimo".
La Armada admite hacia el fin de la jornada que el día que desapareció el Ara San Juan, el comandante del submarino reportó un “problema en las baterías, un cortocircuito”, por lo que salió a superficie para avisar a tierra a través del teléfono satelital. En consecuencia, la Armada le indicó “que cambie la derrota y venga para Mar del Plata”.
Martes 21 de noviembre. Ese día, la Armada Argentina sostiene en conferencia de prensa que se halló una balsa pero que la misma no pertenece al submarino Ara San Juan. Además, revelaron que se divisaron "bengalas blancas" y que si bien se dispuso inmediatamente que una embarcación se dirija a la zona, se aclaró que la nave disponía de bengalas de otros colores.
Más países ponen a disposición medios para ayudar en el operativo de rastrillaje que se desarrolla en las aguas del Atlántico sur. Alemania aportó un avión P3, Francia un avión Falcón 50, Colombia un avión C235, Perú un aeronave Fokker 60 y Uruguay un avión B 200. A su vez, decretan el alerta sanitaria en un hospital de Comodoro Rivadavia como parte del procedimiento de rescate.
Por la noche se conoce la información de que se ha detectado una señal a partir de la cual se estableció un nuevo perímetro de búsqueda en el Atlántico Sur. Cerca de la medianoche, una flota encabezada por la corbeta Drummond se dirige al lugar para tratar de verificar si esa señal corresponde al submarino.
Miércoles 22 de noviembre. La búsqueda se mantiene "en fase crítica", ya que se cumplen los siete días sin comunicación y la falta de oxígeno se transforma en uno de los posibles escenarios de preocupación en el caso de que la embarcación nunca haya salido a la superficie desde su último contacto.
"Hay información muy sensible que obedece al secreto de Estado: estamos hablando de una embarcación de guerra", indicó la jueza federal de Caleta Olivia Marta Yáñez, cuyo juzgado recibe de parte de la Armada la información de la desaparición del submarino.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, envió un mensaje de apoyo para el pueblo argentino en la búsqueda del submarino: "He dado la orden para ayudar a Argentina con la misión de búsqueda y rescate de su submarino desaparecido".
Jueves 23 de noviembre. La Armada sostiene durante declaraciones a la prensa que "hubo un evento violento consistente con una explosión" en el submarino. Y acota que que se produjo una anomalía hipoacúsica el miércoles 15 de noviembre a las 10:31.
Familiares de los tripulantes mostraron su indignación antes este último parte dado por la fuerza. "Tenemos bronca, nos mintieron", aseguró la esposa de uno de ellos. "Mandaron una mierda a navegar", completó indignada la mujer.
"No nos dijeron que están muertos pero dicen que el submarino está a tres mil metros", acotó. "Inauguraron un submarino pintado en 2014 pintado por fuera y cero equipado por dentro", sentenció.
