Un hombre falleció este lunes 19 de agosto luego de que un policía de la Ciudad le pegara una patada en el pecho por "negarse" a despejar el tránsito en el barrio porteño de San Cristóbal. Se trata de Jorge Martín Gómez, de 40 años, que vivía en la calle Estados Unidos de Capital Federal, y trabajaba en un taller y como delivery por las noches. Para su tío, el efectivo policial implicado, identificado como Ramírez, usó su fuerza "en forma desmedida".
"Yo me entero a las dos de la mañana de hoy. Me comunico con mi hija y le digo que se acerque hasta la comisaría para ver qué es lo que pasó. Cuando llega a la comisaría 20 en la calle Cochabamba le dicen que estaba todo arreglado, que no se haga problema porque ya le habían avisado al padre de mi sobrino. Resulta que el padre de mi sobrino, que es mi hermano, está fallecido hace tres años. Desde ahí ya trataron de esconder algo", cuenta Segundo Walter Gómez, tío de la víctima, en comunicación con PERFIL.
El hecho sucedió este lunes por la mañana en la calle Carlos Calvo al 2600, luego de que un colectivero denunciara que una persona entorpecía la circulación de vehículos. Efectivos de la fuerza porteña se acercaron al lugar y habrían corroborado que un hombre se encontraba interrumpiendo la movilidad de los autos. En ese momento el sujeto habría rechazado la voz de alto de uno de los agentes, de apellido Ramírez, y habría sacado un cuchillo "tipo tramontina".
Tras esto, el efectivo le pegó una patada frontal entre el estómago y el pecho y el sospechoso cayó. Luego del golpe, una ambulancia del SAME lo trasladó a un hospital cercano, pero murió. Las imágenes del incidente quedaron grabadas por una cámara del barrio y muestran -a contramano de la versión policial- que al momento de la patada el hombre mantenía ambas manos en su espalada.
Con respecto a la hipótesis sobre lo que pasó, Segundo Gómez asegura: "Yo lo que veo es que mi sobrino va deambulando. No sé si habrá estado borracho o perdido, pero se ve clarito que el policía le da la voz de alto y mi sobrino pone las manos atrás y adelanta la cabeza como preguntando 'qué pasa'. Ahí, el policía, sin mediar palabra, le pega la patada que le causó la muerte", detalla, y agrega: "La patada es de una persona que estudió, que sabe dónde pegar y que está bien instruido".
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Con respecto al estado de Jorge Martín Gómez, su tío confirmó que "problemas psicológicos no tenía", aunque sí de adicción. "Tuvo en 2015 problemas de drogas. Estuvo seis o siete meses en una granja y salió recuperado. Desde ese momento empezó a trabajar en un taller. De noche hacía delivery con una moto que tenía", cuenta.
"Esté drogado o haya tenido un arma blanca, no era era para que el policía actuara de esa manera. No estaba amenazada la vida del policía. En el video se ve evidente. Si vos me decís que saca un arma y lo encara con un cuchillo, se justifica, pero acá no hay ninguna alevosía. El efectivo no corría riesgo. Su actitud es que usó la fuerza desmedida. Había como siete agentes para reducirlo. No justifica de ninguna manera lo que hizo", subraya.
Tras el hecho, la Oficina de Transparencia y Control Externo abrió un sumario por averiguaciones del accionar de Ramírez. El hombre quedó alojado en la Unidad de Investigaciones de Procedimientos Judiciales y podría ser imputado por "homicidio culposo". Este martes será indagado mientras se esperan los resultados de la autopsia. Interviene el Juzgado Nro 8, a cargo del Dr. Bernal y el equipo de Gendarmería Nacional.
AB/MC