SOCIEDAD
los factores humanos

Inundación: expertos explican y analizan por qué se agravó

A la falta de obras y presupuestos subejecutados se suma la construcción de barrios cerrados sin control en tierras no aptas y canales clandestinos de riego.

Urbanizaciones. Podrían ser obstáculo para el normal desborde de ríos. El barrio San Sebastián ( fotos arriba), construido entre 2007 y 2011 sobre el margen derecho del río Luján,
| Cedoc Perfil

Las inundaciones de la provincia de Buenos Aires, que en los últimos días dejaron más de veinte mil personas afectadas, obligan a buscar una vez más explicaciones de este fenómeno que excede lo metereológico y los efectos del cambio climático.
Por un lado, se apunta a la falta de obras y sistemas de alerta. Por el otro, a la construcción masiva de barrios cerrados en zonas que algunos expertos consideran que no son propicias para urbanizar, y a la proliferación de canales clandestinos en los campos.
Obras y emergencia hídrica.  Los especialistas coinciden en que aún faltan grandes obras estructurales, como la construcción de reservorios (grandes pozos que se ocupan con agua de lluvia), y canales aliviadores que permitan cumplir con el rol de absorción del agua, sumados a otras no estructurales, como la recuperación de los humedales y las llanuras de inundación (donde se construyen los barrios cerrados). “En el corto plazo habría que hacer una especie de bypass en la zona donde desemboca el Luján, además de obras macro que atraviesen la cuenca. Esto debe hacerse necesariamente de la mano de obras que posibiliten la captura de aguas en la cuenca alta y media con  sistemas de pequeñas presas”, dice el geógrafo Héctor Zajac. “Hacer este tipo de obras podría llevar unos cinco años. Hay que gestionar a partir de toda la cuenca y no sólo del territorio afectado”.
Ante las críticas por la falta de obras, el gobernador Daniel Scioli decretó la emergencia hídrica y sostuvo que su gestión lleva invertidos $ 12 mil millones en obras hídricas, con obras en marcha por $ 3.200 millones. Desde la ONG Chequeado, sin embargo, advirtieron que en 2014, el gobierno provincial sólo ejecutó el 40% del presupuesto del programa “Control de Inundaciones”, creado en 2010 (ver aparte).

Construcción de barrios cerrados. Para la investigadora del Centro de Investigaciones Geográficas de la Universidad Nacional de La Plata, Patricia Pintos, los últimos 20 años fueron escenario del incremento de suelo urbano en humedales –ya son 9.200 las hectáreas transformadas en barrios cerrados–, en la zona de la cuenca baja del río Luján, donde el río entra en su fase de desembocadura en zonas como Pilar, Campana, Escobar y Tigre.
“El humedal no es un terreno propicio para asentar una urbanización”, explica, ya que se ocupan las planicies de inundación del río, donde el exceso de agua encuentra ahora un obstáculo. “Por ejemplo, en Pilar está San Sebastián, una urbanización de 1.100 has, que ocupa la planicie de inundación del margen derecho del río. Cuando el excedente de agua baja de la cuenca media se encuentra con este gran obstáculo que no permite que el río desborde”, explica. “Esos barrios requieren enormes obras de ingeniería hidráulica para que no se inunden y cuentan con terraplenes para evitar que suba el agua”.
Fuentes de Eidico, responsables de este emprendimiento, dijeron a PERFIL  que cuentan con todas las aprobaciones de la Dirección Provincial de Saneamiento y Obras Hidráulicas (Dipsoh), y de la Autoridad del Agua (ADA).

Canales clandestinos de riego. Otro de los focos es la construcción de canales clandestinos en zonas de la cuenca alta (rural) del río Luján, que en los últimos años, producto del boom de la soja, cambió el uso de las tierras, de un perfil ganadero a otro agrícola. Sólo en Luján, los vecinos denunciaron ante las autoridades la construcción de al menos 114 canales.
La ingeniera María Eva Koutsovitis, prosecretaria del Departamento de Hidráulica de la UBA, explica que “cuando se retira el agua de lluvia, impacta en la cuenca media y baja, que reciben de manera inmediata el agua transportada por los canales clandestinos”. Y agrega “son las autoridades provinciales las que deben cerrar y prohibir estos canales. Hay una falta de control total”.

Lo que falta por hacer
◆ El gobierno bonaerense ejecutó en 2014 sólo el 40% del presupuesto del programa “Control de Inundaciones”, creado en 2010. Antes, en 2013, la ejecución del presupuesto dispuesto para el saneamiento hidráulico había sido del 43%, y de 63% en 2014.

◆ El año pasado, el gobernador bonaerense Daniel Scioli anunció la aprobación de un programa para limpiar el Reconquista, gracias a un crédito de 230 millones de dólares. Dicha obra todavía no comenzó.

◆ Falta financiamiento para hacer obras de retención del río Luján en Suipacha y Mercedes.

◆ Tras la emergencia hídrica en 2013, el gobierno de la Provincia destinó setenta millones de pesos para el desmonte y limpieza de 25 km del río Luján, lo que equivale a sólo un 25% de la totalidad de la cuenca.