La Unidad de Fuerzas Especiales Alacrán está posicionada entre los diez mejores cuerpos de élite del continente. En una competencia donde participan las fuerzas de operaciones especiales de 21 países, Argentina quedó en la séptima posición.
Fuentes judiciales indicaron a PERFIL que el escuadrón de Gendarmería actuó en la captura de dos peligrosos narcos: por un lado, la de Carlos Olmedo Silva Cárdenas, alias “el Mono”, un ex integrante de una fuerza especial de la policía colombiana que tendría vínculos con el Cartel del Valle del Norte y habría sido custodio de uno de sus líderes. Silva Cárdenas fue señalado como uno de los jefes de la banda que intentó traficar cocaína en arroz a Europa.
Por sus antecedentes y su modo de moverse en el país, Gendarmería convocó a los alacranes para abrirse paso en el allanamiento ordenado por Sergio Torres.
Lo mismo ocurrió con César Cornejo Miranda, un mexicano que integraría el Cartel de Sinaloa y que cayó en el barrio porteño de Belgrano, luego de tirotearse con los gendarmes del grupo especial, herir a uno y tomar rehenes. Esta detención se llevó a cabo en abril de 2014, cuando el escuadrón lo sorprendió cenando con su suegro, quien no tenía noción del hombre que estaba frente a él hasta ese momento. Esa causa está en manos de la jueza Sandra Arroyo Salgado.
El cuerpo también participó en el traslado de los hermanos Cristian y Martín Lanatta y Víctor Schillaci, el de Jorge Chueco y el ex funcionario Ricardo Jaime. También custodiaron el último París-Dakar, organizado por Francia, para evitar cualquier acto de terrorismo.