Tras casi 25 años de misterio, una nueva pista sobre la desaparición del cuerpo de Miguel Bru, el estudiante de periodismo que fue asesinado en una comisaría de La Plata en el año 1993, surgió en la causa que intenta esclarecer la cantidad de víctimas fatales de la inundación ocurrida en 2013 en la capital de la provincia de Buenos Aires.
El nuevo dato surgió de casualidad cuando el juez en lo Contencioso Administrativo Luis Arias analizó los libros de entradas y salidas de cadáveres secuestrados durante un allanamiento en la Morgue Policial platense, en el marco de la causa judicial que se lleva adelante acerca de la inundación que ocurrió hace cinco años.
Tras ese análisis, y según los registros, entre 24 y 48 horas después de la desaparición del joven Bru, el 17 de agosto de 1993, personal de la comisaría 9a. habría llevado un cuerpo identificado como NN, según la información difundida por el diario La Nación. El cadáver habría terminado en el osario común, donde resultaría muy difícil lograr la identificación, según confirmó el magistrado.
El juez Arias explicó que hizo público el dato para que se sugiera investigar. "No es una pista, es un indicio. Si uno se pone a pensar, no hay mejor lugar para esconder un cuerpo que un cementerio", detalló.
Además de la información del juez, la nueva pista fue revelada por los periodistas Pablo Morosi y Pablo Romanazzi en el libro Genealogía de una tragedia, en el que investigaron las responsabilidades por la inundación de 2013.
Rosa Schonfeld, madre de Miguel, dijo que el nuevo dato "no es una pista certera" y que no hay nada que indique que esto puede ser posible. "¿Tengo que aceptar esto? No, me hace mal", lamentó.
La Suprema Corte de Justicia bonaerense confirmó en el año 2000 las condenas de prisión perpetua para dos expolicías acusados de torturar hasta matar a Bru. Se trata de Walter Abrigo y Justo López. Recién este mes por primera vez desde la desaparición de Bru, se hizo una inspección en la comisaría 9a. de La Plata. El cuerpo jamás apareció.