La suba de la tasa de política monetaria a 30,25% vuelve a preocupar a los sectores productivos porque encarece el costo del capital de trabajo mientras que la suba del dólar presiona sobre los precios de los insumos. Los sectores productivos esperan que sea una medida de coyuntura y se retome una tendencia para bajar el costo del financiamiento. “El crédito de corto plazo ayuda a cubrir los baches”, explica el presidente de Apyme, Eduardo Fernández. “La tasa, que es testigo para el sistema financiero, ya venía alta. Y ahora vuelve a dispararse para un sector que tiene poca espalda para hacer frente al capital de trabajo”, agregó. Con él coincide el presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Miguel Acevedo, para quien “tasas del 30% son muy altas. Es un tema coyuntural para tratar de calmar al mercado. No es un tema de largo plazo. La intervención de la tasa es resultado de la corrida cambiaria”. Los bancos deberán definir qué harán con sus tasas, que se vienen encareciendo por inflación y dólar en el caso de los créditos hipotecarios, por ejemplo. Desde la construcción, Gustavo Weiss, titular de la Cámara sectorial,dijo: “Lo que está diciendo el Central es que no quiere convalidar un dólar mucho más alto de lo que está ahora. Esa es una tasa que afecta a los créditos de los privados y a los flujos de caja, pero esperemos que sea de corto plazo y no se mantenga en el tiempo”. “Seguir subiendo las tasas no es una buena política para la industria. Va a seguir afectando el financiamiento del día a día y las inversiones. Espero que no sea algo que se mantenga en el largo plazo”, agregó José Urtubey, de Celulosa Argentina.
Corrida. En cuanto al dólar, Acevedo aseguró que “los barquinazos no sirven. Lo que se busca es un dólar estable. “El Banco Central tiene reservas y está bien que intervenga”. La divisa norteamericana llegó a tocar los $ 21 ayer. “Las dudas sobre la inflación y la especulación por el impuesto a la renta financiera o los ruidos desde el exterior muestran que no tenemos una moneda fuerte todavía y el dólar sigue siendo un refugio”, evaluó el titular de la UIA. “Con el efecto actual, esto ya va a ser transferido a precios. Se superó la meta del presupuesto”, agregó Fernández. Para Weiss, el dólar alcanzó “un valor razonable”. El próximo es un mes clave para la inflación, que deberá mostrar una baja pronunciada, según los vaticinios oficiales. “Mayo va a empezar a tener una tendencia a la baja”, aseguró Acevedo. “Lo importante es que la producción sigue creciendo, aunque con distintas velocidades”, dijo. Desde el sector pyme, Fernández, en cambio, tiene sus dudas. “La mayoría de las empresas usan insumos de carácter difundido que tienen relación con el valor del dólar. En mi caso es harina, que pasó de $ 238 en diciembre ahora a más de 500 por la corrida cambiaria. Influyeron también energía y combustibles. Pero es un ejemplo de cómo impacta la devaluación, no sólo por la incidencia directa sino por los insumos que vienen con factura a valor dólar”. Para Weiss, el Central “tiene como principal sentido la inflación y las últimas medidas van en ese sentido para poder llegar a controlarla”.
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