Por peligro de derrumbe inminente, peritos policiales determinaron derribar la casa afectada por el accidente aéreo ocurrido el miércoles 18 en el Aeropuerto Internacional de San Fernando, en el que el piloto despistó cuando intentaba aterrizar.
Las autoridades confirmaron que la vivienda en la que chocó la aeronave resultó afectada y producto del impacto se generaron grietas. Por este motivo, se espera que se realice una demolición segura este jueves 19 de diciembre.
Fue por este motivo que, durante la noche del accidente y la madrugada de hoy se dispuso una custodia en la zona. Explicaron que “es para evitar cualquier inconveniente con el avión y la estructura a derribar”.
La familia que vive en el lugar fue asistida de manera inmediata y actualmente se encuentra en una sociedad de fomento. La dueña del inmueble, Narcisa Martínez, había contado que en primera instancia el avión impactó contra un árbol, lo cual generó que reduzca la velocidad.
Martínez relató que tuvo que romper una parte de atrás de su casa para poder salir y poner a resguardo a su hija y a sus nietos. “Dios es grande, sino estábamos todos muertos adentro. Estoy bien”, declaró a los medios. Señaló, además, que antes de irse a la sociedad de fomento, le permitieron llevarse documentación personal y ropa.
A pesar del derrumbe programado, las pericias continúan para poder determinar el motivo del despiste, choque e incendio. En la investigación, deben determinar si el hecho ocurrió por una falla humana o un desperfecto técnico.
Los dramáticos videos del momento donde un avión chocó en San Fernando y murieron dos personas
Los últimos momentos de los pilotos tras el accidente
Narcisa explicó que, tras el despiste de la aeronave, escuchó gritos de quienes comandaban el avión. Lo que contó, es estremecedor. En declaraciones a El Trece, dijo que vio cómo el piloto Martín Fernández Loza, de 44 años, y el copiloto, Agustín Orforte, de 35, “se abrazaron para morir”.
La declaración de la mujer coincide con las primeras versiones de los investigadores, que sugieren que los hombres no murieron por el impacto sino por inhalación de humo o calcinación.“Había muchos gritos, por eso pensamos que había más gente en el avión. Gritos desgarradores, se escuchaban por toda la cuadra. Yo escuché que uno decía “sacame de acá por favor”.
TC/ff
