Flojos de juramento hipocrático

Ser joven a toda costa y a cualquier precio

“La cirugía plástica también está afectada por esta verdadera ‘enfermedad’ de nuestra época: parecer” dice el autor. Gran cantidad de “tratamientos infalibles” que se promocionan constituyen “un acto opuesto a las condiciones éticas que deben acompañar a los actos médicos. La cirugía plástica es Medicina”, recuerda.

Meryl Streep Foto: CEDOC / AFP

Estamos transitando un período de deterioro moral y ético, acompañado por un aumento de desconfianza hacia el otro, hacia lo que nos proponen como solución para algún problema. Sentimos a veces que es un engaño lo que vemos en las propagandas y en los informes en muchos aspectos de la vida social, incluyendo la medicina.
 
El cambio de aquellos valores que se usan para mostrar nuestro ascenso social, nuestra diferencia con otras personas y que se necesitan para ser “importantes” es en la actualidad muy diferente a los de antaño. 

Todo aquello que antiguamente generaba reconocimiento como honestidad, ética, sencillez, buena conducta, buenos modales, cultura ha sido reemplazado por el parecer. Pero muchos quieren ser más poderosos económicamente, más jóvenes, menos envejecidos y eso también ha incrementado las consultas en el área de la medicina estética.

Cirugía plástica: ¿Cuándo puede fallar?

Por lo tanto la cirugía plástica se ve también afectada por esta verdadera “enfermedad” de nuestra época; estamos inmersos en un verdadero mercado de tratamientos y medicamentos casi milagrosos que no solo aparecen en las redes sociales sino además en los programas televisivos y pagados por médicos que en el área de la medicina estética ofrecen “infalibles” tratamientos para el envejecimiento y el deterioro que los años producen, inevitablemente en  nuestros tejidos.

¿Cuántos tratamientos han aparecido en los últimos años, prometiendo mejorías estéticas casi rayanas con lo imposible? Sugiriendo además que, quienes presentan estas aplicaciones, son los más avezados y los primeros en esta vanguardia”.

Este tipo de propaganda médica constituye un acto opuesto a las condiciones éticas que deben acompañar a los actos médicos. La cirugía plástica es Medicina.

La sociedad también ha podido observar la aparición de numerosos 'institutos de belleza' donde se mezclan el spa, la mesoterapia, los masajes, la aplicación de sustancias y el embellecimiento de las uñas"

La sociedad también ha podido observar la aparición de numerosos “institutos de belleza” donde se mezclan el spa, la mesoterapia, los masajes, la aplicación de sustancias, muy de moda, como la toxina botulínica, el ácido hialurónico, el embellecimiento de las uñas, la depilación definitiva y el uso de laserterapia, nutrición, tratamientos para adelgazar y, en algunos casos, estilismo.

Y quizás, lo más importante de todo sea que muchas veces el responsable de estos institutos no es médico e incluso no tiene nada que ver con la medicina.

Rellenadores. Habitualmente el ácido hialurónico no es peligroso, pero lasrevistas médicas registran complicaciones que pueden poner en peligro la funcionalidad de alguna estructura facial. Y son temporarios.


Lo que la gente debe conocer es que lo que parece algo tan simple como “inyectar o poner una pequeña inyección” puede dar origen a severas complicaciones y/o resultados desfavorables, cuando no son hechas con la idoneidad y la responsabilidad necesaria.

La condición básica en el envejecimiento palpebral y facial con alteraciones que modifican las posiciones de las cejas, la aparición de bolsas palpebrales, la pérdida del juvenil ovalo facial, “ las cuerdas” que se forman y se extienden por debajo del mentón llegando hasta cerca de la clavícula (papada de piel o asociada a la grasa ) o lo que conocemos como “mofletes” que aparecen a los costados del mentón abultando esas áreas, son condiciones inevitables que acompañan el envejecimiento de todas las personas en menor o mayor grado. 

Ahora utilizan células madre también para eliminar arrugas

El tratamiento de todos estos problemas sólo se puede resolver en forma favorable y duradera -que se mantengan en el tiempo- mediante tratamientos quirúrgicos clásicos; la experiencia demuestra que su efectividad dura años.

Por otro lado, hay varios problemas que afectan la autoestima de las personas que envejecen: la “aparición” de las arrugas periorificiales clásicas, como las famosas patas de gallo, el código de barra labial, las horizontales de la frente -que se producen por acción de los músculos de la mímica cuya contracción arruga la piel donde estos músculos están insertados. Algunas personas tienen arrugas muy marcadas, mientras en otras son apenas perceptibles. 

No solo son causadas por el envejecimiento sino además por las características hereditarias y congénitas de la piel, la excesiva e inadecuada exposición a los rayos ultravioletas.  

Tomar sol” tiene sus beneficios y sus consecuencias. En una piel oscura, que es más gruesa, más sebácea y con más protección, las arrugas son menos visibles y tardan más en aparecer. 

Este tipo de arrugas se trata disminuyendo o anulando la contracción del músculo que la produce (toxina botulínica). Pero cuando ya se “marcó” la piel se debe tratar con algún tipo de sustancia de relleno (en la actualidad en ácido hialurónico) para disminuir la profundidad del surco. Habitualmente el uso de este “rellenador” no es peligroso para el paciente, pero han sido descriptas y publicadas en trabajos científicos las complicaciones que pueden poner en peligro la funcionalidad de alguna estructura facial, como en el caso de la visión.

La rama de la cirugía plástica que se ocupa de la estética corporal es un acto médico y como tal debe cumplir con los mismos requisitos morales y éticos de cualquier otro tratamiento.