Bullrich 2023: el voto ‘enojado’, el armado de equipos, recorridas por el Conurbano y la relación con Macri

El fin de semana pasado, Patricia Bullrich se reunió con Horacio Rodríguez Larreta para hablar del futuro, junto al diputado Gerardo Milman y al secretario general porteño, Fernando Straface. Pero esa no había sido la primera reunión entre ellos. Dos semanas antes habían estado a solas, sin asesores, hablando durante casi una hora de un monotema: Mauricio Macri. En esa cumbre, además, le planteó que Straface podía ser un buen interlocutor entre ambos.

Pero el tema Macri acaparó todo. Es que el camino de Bullrich para 2023 está atado al ex presidente. A diferencia de Larreta, nadie imagina una interna entre la presidenta del PRO y Macri. El jefe de Gobierno ya adelantó que jugará sí o sí.

Es más: en medio del viaje más importante que hizo la ex ministra de Seguridad a Estados Unidos, el ex mandatario irrumpió en la escena pública de manera sorpresiva con una impactante foto con Donald Trump en su residencia en Palm Beach.

Patricia Bullrich atacó a Cerruti por las tierras en la Patagonia y lamentó el “desinterés” del Estado

La fuerza de esa imagen desequilibró a Bullrich, quien en una entrevista desde EE.UU. terminó planteando que Macri le había dicho que no iba a ser candidato. Luego explicó que, en rigor, no quería hacer hipótesis sobre hechos que no ocurrieron y que, en todo caso, ella no podía bajarse de su precandidatura por un supuesto.

En este contexto, a pesar de las fricciones expuestas, el vínculo con el ex presidente sigue siendo clave para ella: es quien más la animó desde su salida de la Casa Rosada. “Patricia es la única que está manejando de manera inteligente el fenómeno Milei”, repite Macri ante sus interlocutores frecuentes a sus oficinas de Olivos. Es más: cree que, si él no juega, ella podría ganar con la hipótesis de que capturaría, en un eventual ballottage, los votantes liberales.

Es por ello por lo que una de las cuestiones claves para la titular del PRO será sostener un vínculo “emocional” con los votantes. Esto supone continuar con sus siempre duras críticas al kirchnerismo y disputar el electorado “enojado” con la política con Javier Milei y un sector de los liberales.

Sin candidatos ni estrategia visible, el fenómeno Milei sigue creciendo en Córdoba

Esta estrategia de sumar “por derecha” colisionó hace dos miércoles en la mesa nacional de Juntos por el Cambio, donde tanto los socios de la UCR como de la Coalición Cívica fueron muy enfáticos en que se podía romper el frente electoral si se le abrían las puertas a Milei. Larreta y María Eugenia Vidal apoyaron esta idea. Y hasta Macri fue el padrino de la frase “somos el cambio sin anarquía”, referida al economista de La Libertad Avanza. Al otro día de esa cumbre se cruzó con un abrazo con Milei en la puerta del canal LN+ sobre la calle Fraga.

De todos modos, uno de los pedidos que suele realizarle el ex presidente es que muestre equipos. Su radialidad, algo que comparte con Larreta, la transformaron en su propia operadora política. Pero, a diferencia del jefe comunal, que en los sondeos de opinión es visto como parte de un equipo de gobierno, a ella aún no se la observa en ese rol.

Acaso por ello, sin avisarles de antemano, juntó a unos treinta dirigentes, a quienes convocó uno a uno desde su teléfono celular. Cuando llegaron la mayoría se encontró con cámaras y fotógrafos. Entre otros el diputado y economista Luciano Laspina (enemistado con Hernán Lacunza, hoy cerca de Larreta), el ex viceministro político del Interior y diputado Sebastián García de Luca y el senador Federico Pinedo.

Larreta y Santilli fueron a La Matanza y Ritondo sumó a Macri para pelear

Luego hubo una segunda convocatoria donde aparecieron dos ex ministros como Jorge Faurie (Cancillería) y Dante Sica (Producción). También entre los equipos se sumaron el diplomático Diego Guelar, el economista Aldo Abram, el experto en energía Emilio Apud y el macrista ortodoxo Hernán Lombardi. De esas reuniones surgió la idea de que viaje a Vaca Muerta en los próximos días.

En ese marco, el otro eje de su campaña serán las recorridas. Además del interior, Bullrich planea ir a los lugares “más complejos del país”, según cuentan cerca de ella. “Va a ir sin chaleco antibalas a Fuerte Apache y a varias villas del Conurbano”, adelantan.

En la mesa de estrategia, que integran, entre otros, el diputado Gerardo “Jerry” Milman y el legislador Juan Pablo Arenaza (su armador porteño), piensan en que dedique siete de cada diez caminatas al Conurbano. El otro 30% a la Ciudad y el interior. Con “cero aparato” y pocos dirigentes a su alrededor.

El enojo de Patricia Bullrich con Juntos por el Cambio por el rechazo a Javier Milei: "Es un error total"

Milman es quien coordina esas bajadas bonaerenses. Además de Fuerte Apache están nominadas recorridas por Francisco Solano, San Martín y Avellaneda.

Diputados nacionales y provinciales (como el senador bonaerense Juan Pablo Allan y la diputada Florencia Retamoso), además del intendente de Capitán Sarmiento, Javier Iguacel, la acompañarán en varias recorridas.

A pesar de que hoy Iguacel es la carta para la gobernación que presenta Bullrich, hace diez días se la vio en La Matanza con Cristian Ritondo, el jefe del bloque de diputados del PRO. Jugará todos los partidos que pueda a la vez hasta 2023.