divorcio gastronómico

La pelea Barrionuevo-Camaño, sin freno

Luis Barrionuevo y Dante Camaño, el hermano de su ex esposa Graciela Camaño, siguen tensando la relación por el control del gremio gastronómico en CABA. Camaño ganó las elecciones en 2021, pero Barrionuevo no admitió la derrota. Esta vez, el enfrentamiento se dio entre empleados, a golpes, y hubo protestas que llevaron al cierre por dos días de un comercio.

Enfrentados. El divorcio entre Barrionuevo y Camaño desató un enfrentamiento por el sindicato. Foto: cedoc

La pelea entre Dante Camaño y Luis Barrionuevo no se extinguió y siguen las tensiones en torno al control de la Seccional Ciudad de Buenos Aires del gremio de gastronómicos, con choques que se trasladan a las calles, en medio de protestas y acusaciones cruzadas.

El disparador de un nuevo conflicto fue el despido de un empleado del restaurante Estilo Campo, Leonardo Ortiz, hace una semana. Desde el lado de la Lista Azul, que conduce un hombre de confianza de Barrionuevo, Humberto Ballhorst, denunciaron una maniobra de Dante, el hermano de Graciela Camaño, la ex mujer de Barrionuevo, y hombre que lidera el sindicato porteño tras las elecciones de 2021.

“Dante Camaño les pidió a los dueños que me echaran, son amigos”, dijo el trabajador tras enterarse que no pertenecía más a la firma que se ubica en Puerto Madero. Acto seguido, se desencadenó una protesta en las inmediaciones del local por parte de los integrantes de la Lista Azul, que derivó en el cierre del establecimiento por dos días. La medida de fuerza tuvo efecto ya que en las últimas horas, tal como remarcan ante PERFIL desde la oposición, tuvieron que reincorporar al trabajador.

Dante Camaño: "Barrionuevo está desequilibrado, se cree el dueño"

Para Juan Castro, el secretario administrativo de Uthgra CABA, existe otra versión. En diálogo con este medio, precisó que “la gente de Barrionuevo le pegó a uno de los gerentes, que tuvo desprendimiento de retina, estuvo muy complicado. Y después coparon el lugar y no permitieron el ingreso del público, por dos días, con el prejuicio económico que eso implica. Fue una locura total y no saben cómo arreglarlo”.

El dirigente oficialista también mencionó que se ocuparon de asistir al agredido, que los dueños del local “tienen miedo” y que “estas cosas no se pueden permitir”. “Más allá de las peleas que tenemos con Barrionuevo, nosotros hay cosas que no hacemos, no podemos dañar a las empresas. Hay que defender a los trabajadores”, aseveró.

A su vez, descartó que Camaño esté comprometido con la situación laboral de Ortiz: “Lo dejaron trascender, dicen que fue culpa de Dante, una mentira. Además, la persona que señalan como delegado no lo es”.

El enfrentamiento entre Camaño y Barrionuevo se desató a raíz del divorcio entre el ex senador por Catamarca y la legisladora de Consenso Federal y quedó plasmado públicamente en las últimas elecciones del sindicato, que se celebraron en diciembre del año pasado, con victoria de Dante. Para la oposición, no existió transparencia y acudió a la Justicia en pos de anular los comicios, algo que fue denegado en distintas instancias.

El actual secretario general porteño le reprocha al ex dirigente de Chacarita que maneja el sindicato a nivel nacional “como una propiedad privada o bien ganancial”. “Él buscó una interna en este momento cuando tendríamos que estar todos unidos, trabajando por los miles de compañeros en las calles por la pandemia y para que las empresas abran. Él aprovechó este momento de debilidad y armó una lista, con plata de él, que no sé de dónde tiene tanta plata, y sacó esta pretensión de oposición. No me quejo, cada uno puede hacer una lista. Pero ya vio que no podía ganar, les ganamos”, determinó ante este medio.

Luis Barrionuevo reapareció y habló de su divorcio de Graciela Camaño

Y comentó que no posee diálogo con Barrionuevo desde “hace veinte años, porque en la Ciudad de Buenos Aires, al revés de otras seccionales, existe una buena administración y recaudación. A nosotros, del gremio nacional nunca nos dieron nada, al contrario, nos sacaron. Es una eterna lucha y siempre quisieron meterles mano a los dineros de la seccional CABA. Ahora explotó también por los desmanejos que hacen, no tienen el dinero que deberían tener. Igual, hay cosas de las que nadie de nosotros es culpable: bajó la recaudación en todos los rubros y los costos no bajaron, al contrario, subieron”.

Graciela Camaño prefiere no meterse en la discusión y se concentra en su actividad parlamentaria. Sin embargo, en esta disputa, está con su hermano.