La coalición conservadora oficialista de Alemania insisten en que la canciller, Angela Merkel, vincule el desembolso de los fondos de la Unión Europea para preservar el Estado de derecho, lo que aumenta el riesgo de un enfrentamiento con los populistas en Polonia y Hungría durante las negociaciones sobre el presupuesto de un billón de euros del bloque.
La semana pasada, el grupo parlamentario CDU/CSU de Merkel aprobó la demanda en un documento expositivo que establece las pautas para la líder alemana para una reunión que sostendrán los líderes de la UE del 13 al 14 de diciembre en Bruselas con el fin de analizar el presupuesto del bloque, el mercado único, la migración y las relaciones externas.
En una sección sobre el presupuesto de la UE para el 2021 al 2027, los legisladores alemanes señalan que la asignación de fondos "debe estar vinculada a la implementación de reformas estructurales nacionales" y que "la preservación del Estado de derecho debe ser un requisito básico".
El documento ofrece apoyo a las autoridades de la UE mientras intentan rechazar las medidas en Europa oriental y en otros lugares para reemplazar las normas y los valores democráticos del bloque con "democracias no liberales", una frase que acuñó el portavoz del movimiento, el primer ministro húngaro, Viktor Orban.
El mes pasado, la UE obligó al partido gobernante nacionalista de Polonia a dar marcha atrás en su intento de ejercer el control sobre el Tribunal Supremo del país después de impugnar una demanda sin precedentes contra un miembro de la UE.
El documento del grupo CDU/CSU hace un llamado a la UE para que el gasto en investigación y desarrollo, infraestructura, digitalización e inteligencia artificial sea una prioridad. Sin embargo, no menciona un proyecto de presupuesto para la zona del euro, que se discutirá en la cumbre.