El Gobierno de Chile criticó duramente al presidente brasileño, Jair Bolsonaro, luego de que acusara a su homólogo chileno, Gabriel Boric, de participar en una ola de violencia que paralizó el país a finales de 2019.
Las declaraciones de Bolsonaro son inaceptables y no se condicen con las reglas de respeto mutuo que rigen las relaciones entre las naciones latinoamericanas, dijo la Cancillería en un comunicado. El Gobierno también citó al embajador de Brasil en Santiago a una reunión para transmitir la molestia del Gobierno por el hecho, según El Mostrador.
“La utilización política de la relación bilateral con fines electorales, con base en mentiras, desinformación y tergiversación, erosiona no solo el vínculo entre nuestros países sino también la democracia, dañando las confianzas y afectando la hermandad entre los pueblos”, dijo la Cancillería.
En el debate televisivo previo a las elecciones presidenciales de Brasil en octubre, Bolsonaro acusó a su rival Luiz Inácio Lula da Silva de apoyar a Boric, “la misma persona que cometió actos de incendio provocado en el sistema de metro de allí”. Los manifestantes quemaron 18 estaciones de metro durante un estallido de violencia en octubre de 2019. Boric, entonces diputado, formaba parte de un grupo de políticos que acordaron redactar una nueva constitución para sofocar la violencia. Esa carta va a un referéndum este fin de semana.
