La mayoría de los estadounidenses dicen que su situación económica no ha mejorado desde las elecciones presidenciales de 2016, a pesar del bajo desempleo y el alza bursátil.
Según un informe de Bankrate.com, más de seis de cada 10 estadounidenses dijeron que no están en mejores condiciones económicas que hace dos años. Las personas de bajos ingresos, las mujeres y las personas en edad de jubilación fueron más propensas a informar que no son más ricas que antes.
La firma de investigación SSRS realizó la encuesta de Bankrate.com del 25 al 30 de septiembre, utilizando una muestra nacional de 1.001 personas. Según una encuesta reciente de la empresa de asesoramiento sobre inversiones Stash, el 44 por ciento de los estadounidenses informaron que su situación financiera no había mejorado, y otro 20 por ciento dijo que sus perspectivas económicas habían empeorado.
"Sabemos que hay una desconexión entre las mediciones económicas generales que hemos visto en el día a día y la experiencia personal vivida", dijo el analista económico sénior de Bankrate, Mark Hamrick. "Todavía hay mucho trabajo por hacer para mejorar la condición económica de los estadounidenses".
Un 78 por ciento de los estadounidenses que ganan menos de US$30.000 al año informan que su situación financiera no ha mejorado en los últimos dos años, mientras que el 27 por ciento dijo que su situación financiera de hecho ha empeorado.
Los estadounidenses en edad de jubilación informaron la tasa más baja de mejora financiera de cualquier generación encuestada. El setenta y seis por ciento de los estadounidenses mayores de 65 años sienten que su situación financiera no ha mejorado en los últimos dos años, mientras que el 18 por ciento dijo que ha empeorado.
Las mujeres también eran menos propensas que los hombres a informar mejoras financieras. El sesenta y siete por ciento de las mujeres dijo que no se había beneficiado de la economía de Trump, frente al 56 por ciento de los hombres. Mientras tanto, el 19 por ciento de las mujeres ha visto empeorar su situación financiera, en contraste con el 15 por ciento de los hombres.
A medida que se acercan las elecciones de mitad de período, el sentido de privación financiera y desigualdad de los estadounidenses podría movilizar a los votantes. "El presidente se ha atribuido la evolución de la economía de Estados Unidos, lo que lo coloca en una situación precaria", dijo Hamrick.
