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Caso Politizado

Conflicto en Lácteos Vidal: una disputa laboral prolongada sin una resolución en el horizonte

"Durante el bloqueo se cometieron delitos, como coacción a la huelga, usurpación de propiedad, amenazas y la prohibición de ingreso al lugar de trabajo", aseguró Alejandra Bada Vázquez, propietaria de Lácteos Vidal.

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El conflicto en la empresa Lácteos Vidal lleva más de cinco años sin una solución definitiva, con un proceso judicial en curso. Un juez laboral incluso dictó un embargo sobre las cuentas de la empresa para cubrir las indemnizaciones de los 29 despidos injustificados. Sin embargo, posteriormente se concedió a la empresa una apelación para reemplazar el embargo económico por un camión y dos acoplados, una decisión que ahora debe ser resuelta por la Cámara correspondiente.

Ante esta situación compleja, buscamos la perspectiva de Alejandra Bada Vázquez, propietaria de Lácteos Vidal, con el fin de obtener una visión más detallada de los acontecimientos.

Vázquez describió la situación como difícil y mencionó que, "actualmente la cuenta bancaria de la empresa está embargada mientras esperan el desarrollo de los acontecimientos". Sin embargo, "existe una oportunidad de negociación y han sido convocados por el juzgado de primera instancia el viernes pasado, mostrando su voluntad de mantener la continuidad del empleo", agregó.

El año pasado la empresa fue bloqueada

La entrevistada señaló que, "el año pasado el sindicato y algunos trabajadores bloquearon la empresa, generando una situación extorsiva. Durante el bloqueo se cometieron delitos, como coacción a la huelga, usurpación de propiedad, amenazas y la prohibición de ingreso al lugar de trabajo". Esto llevó a la pérdida de parte de la leche, ya que, "el bloqueo ocurrió un lunes por la madrugada y las pymes lácteas no operan los domingos ni los sábados por la tarde, lo que resultó en una acumulación de leche sin procesar", añadió.

El miedo está presente en la empresa

Vázquez explicó que el sindicato organizó un evento con asado y cerveza gratuita para todos los participantes, intentando así forzar su causa. La propietaria también mencionó que contrataron a 25 personas nuevas para reemplazar a los trabajadores en huelga, pero fue difícil para ellos ingresar al trabajo debido a las amenazas.

"Algunos ingresaron a través de patrulleros, mientras que otros lo hicieron corriendo por el campo. La situación se tornó violenta, con actos de persecución, apedreo de viviendas y pinchazos de neumáticos de vehículos. Actualmente, existen dos causas penales en curso relacionadas con estos incidentes".

Se trata de un bloqueo extorsivo e ilegal

Según la entrevistada, el sindicato intenta presentar este conflicto como una huelga, pero Vázquez afirma que fue un bloqueo extorsivo e ilegal. "La empresa se encuentra en una situación difícil, ya que el sindicato obtuvo una medida cautelar que inicialmente prohibía los despidos, pero Lácteos Vidal ya había tomado esa decisión", afirmó.

El clima entre los empleados es tenso

La propietaria mencionó que los trabajadores despedidos participaron en actividades ilícitas, como usurpaciones y delitos contra sus propios compañeros, incluso mientras disfrutaban de asados y cervezas. Debido a esto, "los trabajadores que continuaron desempeñándose en la empresa solicitaron que no se permitiera el regreso de los despedidos".

Cuando nos piden que despidamos a los nuevos, nosotros entendemos que eso no lo podemos hacer porque los muchachos son los que salvaron la fábrica junto con los viejos que se quedaron”, concluyó Vázquez.

 

AA / AC