A Máximo Kirchner y Horacio Rodríguez Larreta siempre los unió Racing. De hecho, el fútbol muchas veces sirvió como anzuelo para establecer algunos diálogos o consensos ante determinados temas o debates de la agenda política.
Aunque esta vez no lo consensuaron, los referentes de las dos principales coaliciones optaron por ubicarse del mismo lado de la vereda: en su peor momento desde que asumió la presidencia de Racing, Víctor Blanco recibió el apoyo explícito de los dos en medio de los reproches e insultos que llueven cada 15 días en el Cilindro de Avellaneda, y que se amplifican en redes y en el círculo académico.
Los ocho años de luna miel en los que el club salió dos veces campeón y se ordenó económica e institucionalmente entraron en pausa por los últimos traspiés deportivos, que intensificaron un malestar que empezó con la salida de Eduardo Coudet primero, siguió con la renuncia de Diego Milito de la secretaría técnica y se completó con entrenadores que no estuvieron a la altura.
Máximo tiene a Diego Bossio y al abogado Ciochi en la CD; Larreta a su cuñado Roby Martínez, encargado de márketing
En el medio de todo eso hubo elecciones, es cierto, y Blanco arrasó con el 71,4% de los votos. Pero este 2021 de mediocridad y derrotas acumuladas motivó que, por primera vez durante su gestión, el Cilindro de Avellaneda insultara y cantara contra la comisión directiva.
A las críticas se les suma la interna de la barra brava, que esta semana intimidó al plantel en plena práctica, y una campaña de desprestigio en redes sociales, que dentro del club aseguran que está liderada por un sector (no necesariamente de la oposición).
Racing mantiene sus cuentas ordenadas, crece patrimonialmente, pero falla cada fin de semana en la cancha (incluso con nuevos entrenadores como Fernando Gago, que perdió sus dos primeros partidos). Y eso, ya sabemos, oculta todo lo otro.
Tanto el jefe de Gobierno porteño como el jefe de bloque en Diputados del Frente de Todos se comunicaron con Blanco para transmitirle su apoyo. Máximo incluso lo respaldó de manera pública en una entrevista que hace 15 días concedió al programa Pasaron Cosas, de Radio con Vos: “Están las demandas de la gente, pero tienen más que ver con una etapa de resultados negativos que con una mirada integral de lo que es la administración de Racing en los últimos años. La administración de Blanco ha sido más que correcta”, elogió.
El apoyo no es casual. Los dos tienen injerencia en la comisión directiva: luego de las elecciones de diciembre, Máximo ubicó a Diego Bossio como protesorero y al abogado de derechos humanos Diego Ciochi como vocal, mientras que Rodríguez Larreta mantuvo la línea familiar a través de su cuñado, Roby Martínez, esposo de Ximena Vallarino Alfaro Díaz Alberdi, vocal de la comisión directiva y encargado de las áreas de Marketing y Comunicación de Racing. Motivos suficientes para apoyar a la gestión y esperar a que pase la ola de cuestionamientos.