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Más y mejor ciencia al servicio de la Justicia

Avanzar en un registro de ADN para todos los delitos implica contar con asesoramiento científico que garantice rigurosos procedimientos y buen uso de los mismos.

Palacio de Tribunales
Palacio de Tribunales. | Cedoc

Para mejorar la calidad de vida de los argentinos debemos aplicar más conocimiento científico a las políticas públicas. Es uno de los objetivos de nuestro gobierno. En este caso, trabajamos para que haya más ciencia y mejor tecnología puestas al servicio de la justicia y la seguridad.

Argentina cuenta con un reconocido antecedente en el uso de datos genéticos para avanzar en materia de justicia: la creación, durante el gobierno de Raúl Alfonsín, del Banco Nacional de Datos Genéticos. Un archivo de material genético y muestras biológicas de familiares de personas secuestradas y desaparecidas durante la última dictadura que permite restituir la identidad a nietos apropiados.

Más recientemente se sancionó la ley para la creación del Registro Nacional de Datos Genéticos vinculados a delitos contra la integridad sexual. La Secretaría de Gobierno de Ciencia tiene la responsabilidad del trabajo de acreditación de laboratorios forenses a estos fines, y lo hace con un equipo de científicos de alto nivel y aplicando los estándares internacionales en materia de calidad y cuidado para evitar, por ejemplo, la contaminación de muestras.

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Inquietud por el proyecto de crear un registro de ADN "para todos"

Avanzar en un registro de ADN para todos los delitos implica contar con asesoramiento científico que garantice rigurosos procedimientos y buen uso de los mismos: métodos de extracción de la muestra protocolizados según recomendaciones internacionales, certificación y acreditación de laboratorios para cuidado, cadena de custodia de muestras y manejo de la información, y finalmente el uso correcto y riguroso de los datos.

Es importante aclarar que la huella genética no es susceptible de ser utilizada con otros fines que no sean la identificación ya que se trata de un patrón del "ADN no-codificante" del genoma humano y no de información de secuencia de genes o ADN codificante. La porción "no codificante" es la que contiene mayor variabilidad y no aporta información sensible sobre las personas (predisposición a enfermedades, por ejemplo), sino que se limita a permitir su reconocimiento.

(*) Secretario de Articulación Científico Tecnológica Ministerio de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva