COLUMNISTAS
HOSTIGAMIENTOS

Un gobierno muy reaccionario

La persecución a Buenos Aires y a Horacio Rodríguez Larreta, el líder opositor más abierto al diálogo, lo engrandece, lo convierte en la alternativa a un gobierno inepto. A los Fernández solo les hace daño. ¿Estarán en sus cabales los estrategas del Gobierno que lo fomentan? Cuando se ataca a la gente no es fácil recuperarse.

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El martirio de Horacio. San Serapio, óleo sobre lienzo de 1628 del artista español Francisco Zurbarán. | Pablo Temes

El encierro prolongado nos afectó a todos. La gente se volvió más agresiva, fanática y a veces perdió la capacidad de razonar. Perú y Ecuador celebrarán pronto elecciones presidenciales. Las campañas y las actitudes de algunos de sus dirigentes son tan disparatadas, que sólo se explican por el deterioro intelectual provocado por el aislamiento. He recopilado anécdotas para un texto de humor que contará también con tonterías ocurridas en Estados Unidos, Argentina, Chile, Colombia y Brasil durante estos meses.   

Algunos países como Argentina perdieron la brújula y van al pasado. El Congreso cortó recursos a la Ciudad de Buenos Aires porque algunos políticos no soportan que la capital esté mejor que las ciudades en las que ellos fracasaron. En vez de mejorar la vida de sus municipios buscan la igualdad por abajo: que todo esté mal.

Hay políticos que no estudian la historia, se dejan llevar por venganzas y bajas pasiones. No entienden que la persecución casi siempre agrandó a los perseguidos. A Perón el acoso insano de 20 años le otorgó un protagonismo que trascendió a su muerte. La persecución  de los golpistas bolivianos contra Evo Morales colaboró con el triunfo contundente de Luis Arce en Bolivia. Como previmos en esta columna hace meses, la persecución a Rafael Correa lo fortaleció: su candidato Andrés Arauz encabeza claramente las encuestas. La disparatada persecución a Mauricio Macri agranda su imagen. La semana pasada hablé con un mandatario, que no es de los que llaman de derecha, que dijo “reconozco la diferencia” comparándolo con el actual.

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Esto suele pasar cuando se agrede a un líder político. Si el ataque es a una ciudad las consecuencias son imprevisibles. La gente no es sumisa y menos en la sociedad híperconectada. En los últimos cincuenta años hubo solo un caso similar en el continente. Cuando Abadalá Bucaram fue elegido, Quito provocaba la envidia de otras ciudades ecuatorianas porque había tenido excelentes gobiernos.  Bucaram quiso aprovecharse de la antipatía y atacó a la capital, sin saber que la gente normal es generosa y no siempre comparte las pasiones mezquinas de los políticos. La persecución rebotó, el país reaccionó y derrocó al gobierno cuando iba a cumplir seis meses. La persecución a Buenos Aires y a Horacio Rodriguez Larreta, el líder opositor más abierto al diálogo, le engrandece, le convierte en la alternativa a un gobierno inepto. A los Fernández solo les hace daño.

Ciudadanos. Actualmente los ciudadanos comunes quieren ser protagonistas de su destino sin  que nadie les organice. Los vecinos de Buenos Aires reaccionarán inevitablemente, la publicación del libro de Juan José Sebreli sobre la desobediencia civil es oportuna. La gente automovilizada va a expresarse. Eduardo Duhalde, con su experiencia, ha advertido repetidamente sobre el peligro de un conflicto. ¿Estarán en sus cabales los estrategas del gobierno que lo fomentan? Se desploma en todos lados la imagen de los Fernandez y la de sus socios que participan de la agresión a los habitantes de la ciudad. Cuando se ataca a la gente no es fácil recuperarse.

El gobierno es muy reaccionario. Mientras la ciencia y la técnica progresan aceleradamente en el mundo, ellos no tratan de integrar al país al siglo XXI, sino que quieren volver a la Edad Media. Políticos millonarios que nunca produjeron nada, ponen “impuestos a la riqueza” para que los productores sean menos eficientes. No intentan que los pobres vivan mejor, sino que los demás se inutilicen. Quieren impedir que los agricultores trabajen en  cualquier predio que haya sufrido un incendio, para que holgazaneen como ellos. Viven de pseudo teorías del siglo pasado que tampoco entienden y desconocen el mundo real.

Pobrismo. La filosofía del pobrismo corroe al país. Sus predicadores dicen que los pobres son privilegiados porque es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja a que un rico entre al reino de los cielos. No han leído los evangelios, no saben lo que era una aguja. Felizmente en nuestro país no hay camellos y los guanacos pueden pasar jugando debajo de lo que los evangelios llamaron aguja.  

Los electores deciden ahora lo que quieren en forma cada vez más independiente

Un difusor de esta doctrina medieval dijo que soñaba con que cada argentino tenga una vaca que le proporcione la leche  y la carne que necesita para subsistir, sin empresas que se enriquezcan produciendo alimentos. Es obvio que nunca vio de cerca a una vaca, ni tiene idea de cómo funciona el campo. Es gracioso imaginar cómo funcionaría su distopía: todos los argentinos ordeñarían su res antes de ir a la oficina, le cortarían un pedazo del lomo para el almuerzo y la mandarían a caminar por las calles con paseadores de bovinos sangrantes.

En el siglo XVIII se inició un proceso de urbanización sin retorno. Desde ese entonces los seres humanos han emigrado masivamente del campo a la ciudad en busca de los bienes y servicios que aparecieron con el capitalismo. En muchas décadas solo hubo un país que impulsó una distopía agrarista, la Camboya de Pol Pot, que obligó a los habitantes de las ciudades a establecerse en el campo. El resultado fue la muerte de una cuarta parte de la población. Vietnam invadió el país para que acabar con esta chifladura que horrorizó al mundo.

En el siglo XXI los países se desarrollan fomentando la ciencia, la técnica, el campo se tecnifica cada vez más, usa drones, máquinas, emplea cada vez a menos trabajadores. Suponer que Argentina puede progresar volviendo a la Edad Media es disparatado, pero así piensan algunos miembros de la anacrónica derecha nacional y popular.

Revolución. Vivimos en un mundo globalizado en el que no progresaremos si no propiciamos una revolución en la educación. Cuando los niños que actualmente ingresan a la escuela, terminen sus estudios, habrá desaparecido el 70% de las ocupaciones existentes. En los próximos diez años, los trabajos rutinarios o predecibles, van a ser asumidos por robots.

Según la Universidad de Oxford las actividades que tienen mayor probabilidad  de desaparecer son: cocineros 81%; dependientes de tiendas 92%; las agencias de viajes serán  reemplazados por aplicaciones como despegar.com, no existirán camioneros, taxistas, empleados en los supermercados, desaparecerá el 60% de los abogados.

La mayoría de los jóvenes saldrá a trabajar en oficios que ni siquiera imaginamos actualmente. Por el momento tienen futuro carreras como experto en inteligencia artificial, en Ingeniería medioambiental, en innovaciones del sistema educativo, seguridad informática, especialistas que mejoren la producción y eficiencia de la industria alimentaria. No asoma en la lista de Oxford “piquetero”. El tema ha sido estudiado por la universidad de Oxford, el MIT, y decenas de libros como The Robots are Coming: A Human’s Survival Guide to Profiting in the Age of Automation, de John Pugliano. La cuarta revolución industrial, la de la Inteligencia Artificial y la robótica está entre nosotros y se aceleró con los avances científicos de este año.

Quedará obsoleta la memorización de datos, tan importante en la antigüedad, porque la mayoría tendrá en su cerebro un nano elemento con tanta información como el Google. La educación no debe preparar a los niños en las áreas en que los robots son mejores, como la acumulación y procesamientode datos. Necesita estimular la inteligencia, la creatividad, la imaginación, la libertad para pensar y ser capaz de enfrentar lo imprevisto. Memorizar es inútil, memorizar disparates, peor.

Adoctrinar. Soledad Acuña, Ministra de Educación de la Ciudad, denunció algo insólito. Algunos maestros jurásicos pretenden adoctrinar a los niños con folletos cargados de ideología. Esto se intentó en el siglo pasado y fracasó: lo hicieron durante 70 años con los europeos del Este, que en cuanto pudieron votar con libertad patearon al adoctrinamiento. Desapareció el comunismo. Estuve en un restaurante de Budapest con una amiga que pronunció unas palabras en ruso. Cuando la escuchó el mozo nos pidió que nos fuéramos, porque no había servicio para nosotros. Cincuenta años de adoctrinamiento para convencer a los húngaros de que el Ejercito Rojo había liberado su país no erradicaron su odio a la invasión soviética.

Algunos militantes dijeron que Soledad se oponía al adoctrinamiento de los niños, porque estudió en una escuela dirigida por un nazi de los que trajo Perón después de la guerra. La lógica usual de los que inventan la tradición.

Los predicadores creen que pueden transformar el pasado escribiendo una nueva historia, pero Perón no fue un líder de la revolución socialista. Los generales Anastasio Somoza, Marcos Pérez Jiménez, Rafael Leónidas Trujillo y Francisco Franco que lo respaldaron cuando fue derrocado no eran líderes del proletariado. La asonada tuvo el apoyo del PC de la URSS que no era dependencia de la CIA. La izquierda de la izquierda, concretamente el PC, apoyó los golpes militares de 1955 y 1976, y nunca consideró al peronismo de izquierda. Los jóvenes de las futuras generaciones adquieren una información estrafalaria e inútil para su vida. El culto a López Rega y Hebe de Bonafini suena rancio en la edad del Youtube.

Algunos no entienden cómo funciona el mundo contemporáneo. Hasta el siglo pasado era posible mentir sobre lo que dicen los funcionarios de Estados Unidos en una rueda de prensa, porque la noticia llegaba en una semana. Actualmente los dichos llegan al Departamento de Estado en media hora y se producen problemas inmediatamente. Los funcionarios deben ser conscientes de que pasó la época de la máquina de escribir y el fax. La tercera revolución industrial nos trajo la computadora y la internet.

Despropósitos. Fundar una empresa estatal que compita con Mercado Libre fue tan inteligente como organizar una línea aérea con aviones impulsados por caballos. Alguien en el entorno presidencial debería informar al mandatario de cómo son las empresas de la tercera revolución industrial basadas en la libertad, la participación y otra serie de valores incompatibles con una oficina burocrática. Una empresa de punta estatizada es una contradictio in terminis.

El sepelio de Maradona en la casa Rosada fue otro despropósito. Era obvio que no era el sitio adecuado para un homenaje masivo al ídolo del futbol. Todo se agravó cuando llegaron las barras bravas tan vinculadas a algunos dirigentes K. Perdido el control de la situación, el presidente estuvo correteando por los pasillos de la Casa Rosada con el ataúd del ídolo por el temor a que los violentos se lo tomen. Apareció luego megáfono en mano, tratando de poner orden. Con la irracionalidad que impera, algunos funcionarios endosaron a la policía de la ciudad la responsabilidad por sus equivocaciones. Las imágenes recorrieron el mundo, no presentaron a la Argentina que queremos.

Las persecuciones personales contra oficiales de las fuerzas armadas que declararon en los juicios que investigan la corrupción y la persecución en contra del periodista Diego Cabot son otras tantas equivocaciones. El gobierno ataca en todas las direcciones, a todas las instituciones, para saciar los resentimientos de una persona que manda, está por encima de la gente, del presidente y del país. En estas condiciones ¿podrán tomarnos en serio en  la comunidad internacional?

*Profesor de la GWU. Miembro del Club Político Argentino.