Hugo Juri recibió a PERFIL CORDOBA en su despacho del Pabellón Argentina el día del rector. “Me enteré recién, no sabía”, reconoció, cuando se lo marcamos. Un par de días antes había vuelto de Sevilla. En esa ciudad española, el rector de la Universidad Nacional de Córdoba participó de la Conferencia Internacional de Educación. En ese contexto, además, se firmó el convenio marco de integración entre universidades. “Se está gestando una revolución en la que somos parte. Hemos firmado entre más de 80 universidades un sistema integrado de reconocimiento de tramos educativos. Hoy se habla en el mundo de conocimientos y competencias equivalentes para que el estudiante tenga conocimientos que sean reconocidos por las distintas facultades, no hace falta que sean exactamente los mismos. Antes se tenía que rendir la materia completa, ahora será por tramos, por créditos. Vamos a empezar a hacerlo con la UBA. 250 ingenierías arrancan el año que viene”, cuenta Juri.
Crédito formativo. El rector explica que bajo el nuevo formato que están desarrollando una materia se puede dividir en 12 créditos y un crédito son 10 horas áulicas. El alumno podrá validar ese crédito para seguir estudiando o tener un conocimiento puntual reconocido. “Le llamamos reconocimiento de trayecto formativo para no llamarlo crédito porque hay gente que cree que eso tiene que ver con lo económico. Hoy, para las nuevas carreras, más que el nombre del título interesa el complemento del título, las competencias y los conocimientos acreditados. Un trabajador que maneja un tractor nuevo puede acreditar que entendió como funciona el sistema informático que tiene el tractor y se le certifica ese trayecto formativo. Si sigue estudiando se le puede dar una diplomatura y luego una tecnicatura o nada, se queda con eso y se va a Arcor con algo certificado”, ejemplifica.
Juri destacó que la UNC tiene 2600 materias y que si se las divide en créditos o trayectos formativos son 30.000 núcleos de conocimiento. “Con la sociedad que tenemos con la UBA sumamos 140.000 núcleos de conocimiento diferentes, estamos trabajando en ese mapa. Dentro de unos años no sabemos qué necesidades de carreras vamos a tener, entonces al menos estemos preparados. Ya estamos dando créditos a los sindicatos de municipales de 17 municipios en las Sierras Chicas. Es un sistema universitario, pero deja de ser la Universidad el espacio. La Universidad no es sólo para quien ha terminado el secundario. Hoy los estudios universitarios son necesarios para cualquier trabajador semi calificado. Detroit desapareció porque la gente no estaba capacitada para la nueva forma de producir automóviles. Hoy tenemos que formar gente para los trabajos que vienen. Y un trabajador de esos no puede venir 5 años a la universidad, pero sí puede tomar tramos de conocimiento sobre cómo manejar esos robots”.
-¿Cómo lo toma la
comunidad universitaria?, porque genera resistencias el sistema de créditos.
-Sí, pero las resistencias se generan por cuestiones políticas partidarias
a pesar de que Néstor y Cristina Kirchner, cada uno en su oportunidad, dijeron
que debíamos ir hacia un sistema de créditos. Pero algunos dicen que crédito y
banco no son palabras neutras, que eso es neo liberal.
-Tienen una carga
simbólica que…
-Qué carga simbólica!, la palabra crédito significa acreditar, uno no lo
tendría ni que explicar. El sistema de crédito tiene más de 100 años. Lo usa la
Universidad de Avellaneda y Mujica en la Universidad de la República porque es
la vara que se usa en el mundo. Entra con fuerza a partir del año que viene en
las ingenierías, en Arquitectura y en las informáticas. Se está yendo de a poco
porque las universidades son autónomas.
-¿Implica esfuerzo e
inversión en adaptación de la tecnología?
-Sí, pero es menor que el esfuerzo de la adaptación cultural. El problema
es cultural. Si te bochan en un pedacito, en un crédito no tenés que rendir
toda la materia de nuevo, rendís luego ese tramo. Hay que cambiar cuestiones
conceptuales de lo que es un alumno regular, hay una serie de concepciones
conceptuales que en España llevó dos años.
-Inserción y
deserción parecen ser los dos grandes problemas de la Universidad, ¿cómo lo
están abordando?
-Los problemas de la sociedad son problemas de la Universidad, el del
secundario también. Tenemos que hacer algo para que los que ingresen, ingresen
mejor y para lo que egresen se vayan a trabajar. Hay un plan que se llama Nexos
donde trabajamos en conjunto con los docentes del secundario y tenemos otro, el
Compromiso Social Estudiantil que exige a nuestros estudiantes hacer un trabajo
social para acompañar a los estudiantes del último año del secundario en su
tránsito a la universidad. Son Tutores Pares. El 80% de la deserción es en los
dos primeros años y el colectivo con mayor porcentaje de deserción son los que
vienen del interior.
-¿La deserción se
mantiene estable en los últimos años?
-La mejoría es insignificante comparado con el problema. Podríamos usar los
colegios terciarios para dar un complemento, una pasarela de crédito, poner un
docente universitario y que los dos primeros años de esa escuela técnica de
Villa Dolores sirvan para los dos primeros años de la Universidad y el alumno
viene en tercer año. Así, los dos primeros años se podrían dar en el lugar de
origen del estudiante y sería muy probable que no haya tanta deserción. Y
además el alumno sale con el título de bachiller universitario, hizo dos años
universitarios.
Los números del 2018
-Se aprobó el Presupuesto 2018 para la Universidad, ¿está conforme con eso?
-Siempre se puede pedir más y se puede usar más eficientemente. Es cierto
que Educación tiene el 6%, pero yo pongo el ejemplo de Chile. Cuando fue el
terremoto no le negaron más presupuesto a infraestructura porque ya tenía. Fue
prioritario. El día que la educación sea una prioridad nacional como en Brasil
cambia todo. La Universidad de San Pablo tiene menos estudiantes que nosotros,
pero tiene 15 veces más presupuesto.
-¿Por qué no es
prioridad? Está en el discurso de todos los políticos
-Sí, porque queda bien decirlo. No es prioridad porque no es prioridad en
la sociedad, está en el séptimo u octavo lugar de las prioridades, es un
terremoto que no se ve. El 50% no comprende lo que lee, tenemos resultados
insostenibles.
-¿Y este presupuesto
que es? ¿Es de supervivencia?
-No, es un buen presupuesto. Y durante ´la década ganada´ era un buen
presupuesto. Es un buen presupuesto comparado con los anteriores presupuestos,
pero no pretendan que la Universidad de Córdoba esté entre las 100 mejores del
mundo. Si tuviéramos el presupuesto de San Pablo cómo no vamos a estar entre
las mejores del mundo. Pero no sé si al país le interesa en este momento.
-¿Es cierto que se
quiere sacar a los hospitales universitarios del presupuesto de la UNC?
-Sí,
seguro. Debería ser así. Clínicas y Maternidad están dentro del Presupuesto de
la Universidad y deberían estar en Salud. Que la parte educativa siga siendo
con los docentes universitarios, pero la atención la tiene que financiar el
Ministerio de Salud de la Nación. No tenemos por qué perder el vínculo
académico. Pero el 85% de presupuesto de los hospitales nuestros es para
atención, para comprar insumos, para diálisis, para cirugías, gastos que no son
académicos.
-¿Lo ha planteado a
nivel nacional?
-Siempre lo planteamos y los ministros de Educación siempre lo plantean y
el de Salud pide que no le metan más cosas. Pero la verdad es que tienen que
ser sustentados de esa manera.
-PERFIL publicó la
semana pasada una iniciativa similar pero para los SRT
-Claro. Suena fantástico para nosotros, pero ya me llamaron de Buenos Aires
porque no quieren saber nada. Ese es el tema. No es para educación, pero los
tenemos pegados, que le vamos a hacer.
Rumbo a los 100 años
de la Reforma
A mediados de junio 2018 la UNC celebrará los 100 años de la Reforma
Universitaria. Pero un par de días antes tendrá otro evento destacado: será
sede de la Conferencia Regional de Educación Superior de América Latina y el
Caribe 2018 (CRES 2018), un encuentro que organiza UNESCO cada 10 años. “Allí se
logra un documento que luego conforma la opinión de la UNESCO para la
Conferencia Mundial de Educación Superior. Vienen 3500 rectores y ministros de
educación de toda la región, más 8000 estudiantes”, cuenta Juri. En relación a
la conmemoración del siglo de la Reforma plantea: “Si nosotros logramos llevar
la educación a otros y hacer participar a la sociedad de las decisiones de la
universidad ese el homenaje a la Reforma. La sustancia de la conmemoración de
la Reforma tiene que ver con llegar junto a muchos países latinos a un acuerdo
de integración del sistema universitario. Estamos en eso. La Reforma debería
ser constante”.