Tal como se preveía el gobierno nacional lanzó las primeras medidas económicas , mientras definen los detalles del paquete que constituirá el proyecto de ley de emergencia económica. El viernes por la tarde se conoció la decisión del presidente Alberto Fernández de reinstaurar la doble indemnización para los despidos sin causa por un plazo de 180 días. Esa decisión se concretó a través de un DNU. En tanto, ayer se conocieron otras dos medidas, esta vez vinculadas a la contención de la demanda del dólar y a la recaudación. Por un lado, se definió aplicar un desdoblamiento del tipo de cambio para contar con un “dólar turista” que tendría una cotización extra de 20%, llevando el valor de la divisa a $75.
En otro plano, se introdujeron importantes modificaciones al régimen de exportaciones para granos, leche en polvo y carnes. Para ello se “metió mano” a un decreto y a una resolución. Con la Resolución 196/2019 cerró el registro para declarar exportaciones ya que se dispuso la suspensión para el lunes 16 de diciembre de la registración de las “Declaraciones Juradas de Venta al Exterior” (DJVE). Lo más fuerte para el campo llegó con la firma del decreto 37/2019 y que lleva la firma de Alberto Fernández, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, el ministro de Economía, Martín Guzmán, y de Agricultura, Luis Basterra. Allí se establece que se deja de emplear el esquema de retenciones de $4 por dólar exportado y que ese sistema es reemplazado por un monto fijo de 12%. Por la cotización actual del dólar, el régimen anterior suponía una retención final en torno al 6%, con lo cual esos productos sufrirán un incremento en la presión tributaria.
Entre otros quedaron comprendidos el trigo, el maíz, la leche en polvo, las carnes y productos regionales como el garbanzo. Para el caso del maní, un producto cordobés por excelencia (el 95% de la producción nacional es de la provincia) la alícuota será del 12% con un reintegro del 0,5%. En tanto, la soja subió su retención de los 18% fijo más $4 por dólar que tenía, a un 30%. Con los cambios definidos ayer la oleaginosa sumó un cargo fijo del 12%. El cierre del registro de exportadores dispuesto para el lunes se lee en el mercado como el marco propicio para aplicar nuevos cambios.
Los mismos de siempre. Para Luis Macario, uno de los vicepresidentes de la Cámara de Comercio Exterior de Córdoba (Cacec) y miembro del directorio de la Bolsa de Cereales de Córdoba y de la Unión Industrial de Córdoba (UIC), todo el sector vinculado al agro y la agroindustria tenía presente que, en las circunstancias económicas actuales, iba a haber un aumento de los derechos de exportación. “Es una potestad del Ejecutivo, lo peor de todo es que el sector privado sigue contribuyendo a un Estado que nunca realiza el ajuste. Hay cuestiones sociales a atender, pero en el Estado hay otras herramientas donde se podía empezar a ajustar. Siempre es más fácil cazar en el zoológico, los sectores que aportan a la economía son siempre los mismos”.
Y remarca que el alza en las retenciones no se da, como en el pasado, en un contexto de precios altos para los commodities: “La rentabilidad está muy ajustada y al país lo posiciona muy mal desde el punto de vista competitivo. A partir de ahora nuestros competidores pasan a estar mejor parados. Según su interpretación, el maní crudo pasaría a tener una retención del 12% con un reintegro muy bajo, del 0,5%, en tanto que el procesado quedaría gravado en un 9%”. Y añade: “Cuando me llamaste estaba hablando con un egipcio y cuando le conté con lo que nos amanecimos me dijo ´eso es una locura´. Así estamos. La sensación que tengo es que esta gente (por el Gobierno) está avanzando sobre la marcha, no veo un plan definido con anterioridad. El nivel de retenciones lo irán manejando en función de las necesidades que tengan. Este país necesita siempre tener ingresos de divisas y estas medidas cubren el corto plazo, pero no miran el mediano y largo plazo. Decisiones así complican todo”.
Inviable. “Nosotros vamos a ratificar el comunicado que hicimos hace una semana en la consideración de que el aumento de impuestos no es el camino y no va a lograr el rumbo deseado. Es un golpe para los productores de maíz y trigo, de los cultivos regionales, para todas las economías alejadas del puerto. Se incentiva el monocultivo y hace inviables a muchos cultivos”, asegura Luis Magliano, titular de la Sociedad Rural de Jesús María. Para el dirigente empresario, la suba de retenciones es, además, un golpe directo a las finanzas de los ganaderos y un impulso indirecto para aumentar la oferta interna y contener los precios: “Termina distorsionando el sector de la carne y recae sobre los mismos el esfuerzo. Hay que pensar que el ganado en pie está US$1,20 en Argentina y US$2 en Uruguay y acá nos ponen retenciones. Se hace muy difícil, hay mucho malestar”.
Magliano recuerda que la Mesa de Enlace ya había pedido audiencias con los referentes del ministerio de Agricultura, en tanto agrega que estaban esperando las últimas designaciones para comenzar a trabajar: “Ahora, creo que con las facultades delegadas y la ley de emergencia van a quedar con las manos libres para hacer lo que quieran”.